Boehringer Ingelheim se ha afianzado en 2017 como un colaborador clave para la industria y la comunidad científica en la investigación de los cánceres de difícil tratamiento, principalmente a través de la investigación de terapias dirigidas a las células tumorales y al sistema inmunitario. Y es que, la compañía farmacéutica ha apostado por un enfoque multifacético, encaminado a maximizar las oportunidades en el desarrollo de terapias innovadoras dirigidas a necesidades no cubiertas. En 2017, la farmacéutica ha establecido numerosas colaboraciones externas en el ámbito de la investigación oncológica, desde ampliaciones de relaciones existentes hasta nuevos acuerdos focalizados en una variedad de áreas que van desde la ciencia básica al desarrollo clínico. Una buena muestra de ello es que el 50% de la cartera de productos en fase de desarrollo precoz de la compañía farmacéutica tiene su origen en este tipo de sinergias, siendo una pieza clave de su estrategia de investigación.