El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha decidido abrir una información reservada tras encontrar nuevas anomalías en la gestión de las listas de espera durante el Gobierno andaluz del PSOE. Así, los inspectores han constatado prácticas irregulares en 2018, cuando la presidenta de la Junta de Andalucía era Susana Díaz y la consejera de Salud, Marina Álvarez. Los expertos sostienen que las esperas se dispararon a 300 días para que 22.000 pacientes se inscribieran como demandantes de una operación.