Roche, compañía presidida por Severin Schwan, no levanta la cabeza. Ahora, la compañía ha revelado que su medicamento para el cáncer de mama, giredestrant, no ha superado un ensayo de fase intermedia, lo que ha generado dudas sobre el fármaco. Concretamente, el estudio asignó al azar a 303 pacientes con cáncer de mama localmente avanzado o metastásico con receptor de estrógeno positivo y receptor del factor de crecimiento epidérmico humano 2 negativo para recibir giredestrant. Los resultados arrojaron que giredestrant no logró superar la supervivencia libre de progresión lograda por la elección del médico de la monoterapia endocrina, lo que provocó que el estudio no alcanzara su criterio principal de valoración.