La multinacional catalana que cotiza en el IBEX 35, Grifols, ha experimentado un primer trimestre de 2023 convulso. Ya desde el comienzo del año las previsiones no eran buenas tras conocer la retirada de la presidencia de Víctor Grifols en plena crisis bursátil de la compañía. Un movimiento que dejó a Steven F. Mayer como presidente ejecutivo en un momento no muy favorable.
Con apenas unos meses en el cargo, el recién ascendido a presidente ejecutivo Steven F. Mayer, anunció a finales del pasado mes de febrero que tenía que dimitir por motivos personales. Fue sustituido de urgencia por Thomas Glanzmann, consejero de Grifols desde hace 16 años y vicepresidente desde 2017. Una nueva sustitución que refleja el periodo de inestabilidad en el que se encuentra la compañía farmacéutica, y que además, provocó un batacazo en bolsa de más del 10% en el IBEX 35.
Una tendencia negativa para Grifols que continuaría con la presentación de los resultados financieros de la compañía en 2022, que les llevarían a volver a caer más de un 9% en bolsa por la desconfianza de los inversores ante tantos cambios, despidos y planes de ahorro. En definitiva, desde la llegada del nuevo presidente hasta la presentación de los resultados, la empresa disminuyó un 30% su valor en el IBEX 35.