La Dirección General de Cartera Básica de Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, que tiene como directora a Patricia Lacruz, pretende desfinanciar los fármacos conocidos como los SYSADOA, entre los que se encuentran el condroitín sulfato y el controitín sulfato más glucosamina, aprobados por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, por su eficacia y seguridad. De llevarse a cabo dicha desfinanciación se dejaría sin alternativa terapéutica a pacientes con artrosis de rodilla y manos y con comorbilidades (enfermedades cardiovasculares: hipertensión arterial HTA, isquemia coronaria e infarto de miocardio, y también insuficiencia renal y hepatopatías etc), afectando gravemente a grupos vulnerables que sufren estas enfermedades como son la gente mayor y especialmente las mujeres. Además de las Sociedades Españolas, las Asociaciones Europeas están alarmadas por esta situación y piensan que, efectuar estos recortes sanitarios, significaría atacar la calidad de vida de los pacientes con artrosis.