El inicio del año para la multinacional estadounidense, Johnson & Johnson, ha estado marcado por la reducción del interés en los productos relacionados por la Covid-19 y sus evidentes recortes en esta parcela, una práctica que se ha convertido en muy habitual en el mes de enero en otras de las grandes farmacéuticas de la industria. Consecuencia directa de esto han sido los resultados cosechados en el último trimestre y en el cómputo global del año.
En términos generales, la compañía ha cerrado este último año con un beneficio de 17.941 millones de dólares (16.491.405.312 euros), lo que se traduce en un descenso del 14,1% en comparación a los datos del 2021. Ante este panorama se espera que la compañía estadounidense tome más cartas en el asunto y anuncie cambios. Sin embargo la realidad es otra, desde el medio digital Fierce Pharma señalan que diferentes ejecutivos de Janssen hablaron con empleados de la farmacéutica para informar que se encuentran en una revisión global de las operaciones de los grupos de vacunas y enfermedades infecciosas, que podría acarrear despidos masivos.