La farmacéutica estadounidense, Eli Lilly, ha acordado pagar 13.5 millones de dólares (12.6 millones de euros) para poner fin a una demanda colectiva de seis años que alegaba que la compañía había provocado un sobreprecio en la insulina. Concretamente, como parte del acuerdo registrado en un tribunal del distrito federal en Nueva Jersey, limitarán el precio final a 35 dólares (32,79 euros) por mes, durante cuatro años.
Este pacto se produce tres meses después de que la compañía anunciase la reducción del precio del tratamiento para la diabetes de tipo 1 por la necesidad de “facilitar el acceso a la insulina” y ayudar a los estadounidenses que no podían acceder a la insulina. Un cambio influenciado directamente por el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, quien advirtió a Eli Lilly que bajara los precios mensuales de la insulina a los 35 dólares en los que se encuentra ahora.