La ciudad de Nueva York acoge la celebración de la Asamblea de las Naciones Unidas con la pandemia como eje central de su agenda. Lejos de ser noticia por los debates, iniciativas o conclusiones que de allí nazcan, el foco mediático se ha puesto en esta cumbre por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Las autoridades de Nueva York han establecido que sea requisito obligatorio estar en posesión de un pasaporte de vacunación contra la COVID-19 para poder acceder a los locales de restauración. Bolsonaro, famoso por su postura negacionista del virus y las vacunas, se vio obligado a comer en la calle al no poder entrar en un restaurante por no estar inmunizado. El brasileño ha afirmado varias veces que no necesitaba vacunas, pues su sistema inmunológico - y el de los brasileños - es capaz de defenderse de la Covid-19 por sí mismo.