El pasado martes 2 de febrero la Fiscalía Provincial de Valencia abría una investigación centrada en analizar las deficiencias denunciadas tanto por los pacientes Covid-19 como por los profesionales sanitarios del antiguo Hospital La Fe. Un movimiento que ha cambiado el tono con el que las autoridades valencianas se refieren al caso.
Tras este movimiento la consejera de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valencia, Ana Barceló, ha admitido por primera vez la existencia de fallos, que antes calificaba como “bulos”, en el hospital de emergencia que ha sido habilitado para dar respuesta al incremento de la demanda asistencial debido a la Covid-19. Entre los fallos que ha reconocido Barceló figuran la ausencia de telefonillos a través de los que se produce la comunicación entre pacientes y personal sanitario o la falta de agua caliente.
"Como no puede ser de otra manera, esperaremos a ver lo que nos traslade la Fiscalía para ver todo aquello que requiere", declaraba anunciando el inicio de una investigación propia.