La paralización institucional está acabando por retrasar la nueva configuración del sistema de financiación autonómica, en un año en el que se esperaban avances en las negociaciones entre Gobierno, comunidades autónomas y partidos políticos. Este retraso, por lo tanto, afectaría también a la puesta en marcha de soluciones para mejorar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Ante esta situación, las comunidades autónomas no aguantan más y algunas de ellas, incluso de distinto signo político, se han lanzado a firmar compromisos mutuos en los que exigen al Gobierno una reforma que garantice “la prestación de niveles similares de servicios públicos en todos los territorios”. Esta ha sido una de las principales quejas que han trasmitido este lunes los presidentes de Asturias, Castilla y León, Galicia y Aragón.
Los presidentes autonómicos consideran "prioritario y urgente" que la reforma de la financiación permita que la sanidad se adapte a la dispersión y envejecimiento de la población y a la baja natalidad
En este sentido, Juan Vicente Herrera, presidente de Castilla y León y anfitrión del encuentro, cree que es “prioritario y urgente” que el Gobierno de cumplimiento a los acuerdos alcanzados en la Conferencia de Presidentes y que la reforma de la financiación se adapte a los retos demográficos como la dispersión y envejecimiento de la población, la baja tasa de natalidad, la ruralidad y la orografía.
Debido a que son las comunidades las que gestionan “el día a día” de servicios públicos como la “sanidad”, y que este ámbito se lleva “más del 40% del gasto presupuestario”, los presidentes de estas comunidades han reclamado que el nuevo modelo “se ajuste a los gastos reales”. Así, consideran que se debería tener en cuenta que los grupos de población de personas mayores de 65 años, necesitan “mayor gasto” que otros.
FRENTE COMÚN
En la misma línea se ha manifestado Javier Fernández, presidente de Asturias, quien ha expuesto que el coste de la sanidad en regiones como la suya, “con una población envejecida, dispersa y con menor renta”, es mayor que el de otras con mayor riqueza y con una población más joven y urbanizada. Por ello, ha exigido que estos factores se tengan en cuenta cuando el Gobierno presente su propuesta de financiación.
Fernández y Lambán han puesto de manifiesto que la asistencia sanitaria en comunidades más envejecidas y con menor renta es mayor a la regiones con mayor riqueza y más urbanizadas
Por otra parte, Javier Lambán, presidente de Aragón, ha cifrado en hasta “un 14% más que la media española” el coste de la prestación de la asistencia sanitaria. Así, ha reivindicado que “el Estado del Bienestar debe estar garantizado” tanto en las autonomías más pobladas como las más despobladas.
Finalmente, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido que la llegada de la “recuperación económica” debe servir también para “recuperar el peso de la política sensata y útil”. Es por ello por lo que ha reclamado que se analice cuál es el “coste efectivo” de lo que supone prestar un servicio sanitario. Asimismo, ha propuesto que la sanidad, como “servicio esencial”, mantenga una “relación directa” como la edad de la población.