El Departamento de Salud del Gobierno vasco ha presentado su Plan Estratégico de Cuidados Paliativos de Euskadi 2023-2027. El viceconsejero de Salud, José Luis Quintas, ha sido el encargado de explicar las líneas principales de este nuevo plan, en el que destaca la creación de un nuevo modelo organizativo para distinguir la atención de cuidados paliativos pediátricos de la de adultos.
"Un plan que retoma y refuerza los objetivos del anterior, además de añadir otros nuevos y más ambiciosos, con el propósito de revitalizar el compromiso del Departamento de Salud y de Osakidetza con la equidad, la calidad, y la universalidad de la asistencia sanitaria", se ha informado. Asimismo, se ha puesto también en valor "el compromiso de los y las profesionales de Osakidetza con la atención personalizada y respetuosa con la dignidad de todas las personas, especialmente con las más vulnerables, entre las que indudablemente se encuentran las que afrontan la etapa final de sus vidas".
Según los datos aportados por el gobierno autonómico, en la elaboración del Plan Estratégico de Cuidados Paliativos de Euskadi 2023-2027, condicionada por la pandemia, han participado cerca de medio centenar de personas: del propio Departamento, Osakidetza, profesionales de todas las disciplinas, estamentos y dispositivos que trabajan en cuidados paliativos, equipos de INNOPAL, y una docena de asociaciones de pacientes.
"Un plan que retoma y refuerza los objetivos del anterior, además de añadir otros nuevos y más ambiciosos"
De manera sintetizada, los objetivos de este plan pasarían por "garantizar la atención paliativa integral y de calidad". En este sentido, se prevé la creación de un Consejo Asesor de Cuidados Paliativos de Euskadi. Igualmente, el plan bucaría "aumentar la cobertura poblacional", hasta alcanzar progresivamente el 90% de la población a partir de 2025. Por otro lado, se pondrá en el foco la atención paliativa pediátrica de calidad, creando la mencionada organización específica.
Se implementarán también sistemas de coordinación entre profesionales, así como entre instituciones sociales y servicios sociosanitarios. Otro de los objetivos sería el de impulsar y promover la formación de profesionales en cuidados paliativos, y promover la investigación e innovación en este ámbito.
Finalmente, el plan buscará la coordinación y trabajo en red con otros agentes sociales y comunitarios, y la creación de sistemas de evaluación y seguimiento.
CUIDADOS PALIATIVOS ADAPTADOS
Según ha explicado el viceconsejero de Salud, el modelo asistencial vasco de cuidados paliativos, basado en el trabajo en red, pretende que, en la atención en la fase final de vida, sean los diferentes servicios del sistema sanitario y sociosanitario quienes se organizan alrededor de las necesidades específicas y cambiantes del o de la paciente; y no la persona con necesidades de cuidados paliativos la que tenga que adaptarse a la organización interna de esos servicios.
Siguiendo esta línea, la atención debe estar adaptada a cualquiera de los ámbitos donde se encuentren las personas con necesidades de cuidados paliativos. En el caso del ámbito domiciliario, a través del “circuito Aringarri” de atención 24 horas al día, 7 días a la semana. En el ámbito hospitalario la atención será coordinada entre el equipo especialista de la patología base de la persona enferma, y las Unidades y Equipos de Cuidados Paliativos. En pacientes institucionalizados, la atención ha de ser prestada de forma coordinada con los servicios sanitarios de la propia residencia y con los del ámbito sanitario y sociosanitario.
Los cuidados paliativos pediátricos, por su parte, y como ya se ha mencionado, tendrán su propio modelo de organización específico y en red: un Equipo Multidisciplinar Pediátrico de referencia para todo Euskadi, con la Unidad de Hospitalización a Domicilio Pediátrica del Hospital Universitario Cruces como cabecera, y sus correspondientes equipos en la OSI Araba, la OSI Bilbao-Basurto, y la OSI Donostialdea como referentes asistenciales de paliativos pediátricos de hospitalaria y en domicilio, y coordinados siempre con los recursos disponibles en cada territorio, para garantizar una atención de calidad adaptada a las necesidades del o de la paciente y sus cuidadores.