El Departamento de Salud y Osakidetza han dado a conocer los avances alcanzados desde la puesta en marcha de la Estrategia de Atención Primaria del País Vasco, una "estrategia específica para una cuestión de máxima prioridad en la agenda política del Gobierno vasco", como es reforzar este nivel asistencial. Entre los primeros "pasos tangibles" que se han dado cabe destacar la ampliación de 46 plazas de Medicina de Familia y Enfermería, a las que ese sumarán 40 el próximo año, hasta alcanzar las 86 plazas, lo que permitirá reducir el ratio de pacientes por cada médico o médica.
Así lo ha explicado este miércoles la consejera de Salud, Nekane Murga, en la Comisión de Salud del Parlamento Vasco, donde ha comparecido acompañada por el viceconsejero de Salud, el doctor Iñaki Berraondo, y la responsable del despliegue de la estrategia en Osakidetza, la doctora Susana Martín. Los comparecientes han dado cuenta del contenido y las medidas que contempla la Estrategia de Atención Primaria, incluidas las que ya se han empezado a desarrollar, 15 de las 35 que contiene el documento. Con ellas se busca dar un mejor servicio a la sociedad vasca, además de facilitar una mejor organización a los profesionales que la integran.
"La percepción del conjunto de la sociedad sobre la atención que recibe en los centros de salud y sobre sus profesionales sigue siendo muy buena"
La consejera ha recordado que el Departamento de Salud lleva tiempo trabajando en "estrecha colaboración" con diferentes agentes implicados (profesionales de los centros de salud, unidades de investigación, colegios profesionales, sindicatos o grupos políticos) para dar respuesta a las transformaciones sociales que se están dando, y que exigen a su vez cambios en el modelo organizativo y en la dotación de los centros de salud. El envejecimiento de la población, que está dibujando una población con más enfermedades crónicas y una mayor dependencia, unido a una "medicalización social, en el sentido de que se acude a la consulta médica por muchas cuestiones que antes se resolvían en el ámbito familiar".
Ello supone un modelo de atención sanitaria que intenta prevenir o evitar en la medida de lo posible las hospitalizaciones mediante actuaciones proactivas en la Atención Primaria, hacen necesario el refuerzo de este nivel asistencial. "La percepción del conjunto de la sociedad sobre la atención que recibe en los centros de salud y sobre sus profesionales sigue siendo muy buena", ha afirmado la consejera de Salud.