La justicia admite a trámite la querella criminal interpuesta por los hijos de una mujer de 85 años que falleció tras denegarle el acceso a UCI, según denuncian los mismos. En 2020, la bilbaína murió cuando el hospital de Basurto le denegó este acceso debido al protocolo anti-Covid. En total, seis médicos de Osakidetza han sido acusados por homicidio doloso y omisión de socorro.
En concreto, se trata de cinco médicos de Urgencias, Traumatología y anestesistas del hospital de Basurto, además del responsable del protocolo anti-Covid de Osakidetza. Según detalla El Correo, los hechos ocurrieron cuando, el 23 de julio de 2020, la mujer de 85 años resbaló y se fracturó la cadera.
“Los motivos por los que se denegó el tratamiento necesario para la supervivencia son contradictorios e indeterminados"
En el hospital, a la paciente, que sufría una dolencia cardiaca, le suministraron fármacos para el dolor: morfina y haloperidol. A consecuencia de esto, se descompensó y comenzó a sufrir episodios múltiples de hipotensión hasta entrar en estado grave. A pesar de que los hijos de la fallecida intentaron que su madre fuese ingresada en la UCI, durante varias ocasiones entre el 23 y el 25 de julio, no lo consiguieron.
“Los motivos por los que se denegó el tratamiento necesario para la supervivencia son contradictorios e indeterminados. Primero, por no estar lo suficientemente grave, después por no cumplir los criterios de reanimación que no se especifican, y por último por su deterioro cardiológico y su grave estado de salud”, apunta la querella interpuesta.
En cuanto recibió el alta en Traumatología, la paciente fue trasladada a planta, y quedó ingresada en una habitación del Pabellón Revilla. A la familia le comunicaron que la paciente no cumplía los requisitos para estar en la UCI y que en planta iba a recibir los mismos cuidados, pero, de acuerdo con los hijos de la fallecida, esto no fue así. La mujer murió mientras dormía.
La familia acusa de homicidio por dolo eventual, omisión del deber de socorro, discriminación y provocación con apología del delito a cinco doctores y al responsable del plan de contingencias
Ahora, la familia acusa de homicidio por dolo eventual, omisión del deber de socorro, discriminación y provocación con apología del delito a cinco doctores y al responsable del plan de contingencias de Unidades de Cuidados Intensivos en la pandemia. De este modo, denuncian que había camas libres y que discriminaron a su madre por su edad. Además, aportan dos informes periciales de tres médicos en los que se aprecia negligencia en este caso.
La pandemia de Covid-19 vivida en 2020 obligó a los sistemas sanitarios a trabajar, en la mayoría de los casos, por encima de sus capacidades. Esto repercutió en que se tuvieran que crear protocolos, que en muchas ocasiones pasaban por no ingresar en UCI a pacientes mayores o a casos que no fueran considerados como ‘graves’.