El Juzgado de lo Social número 9 de Bilbao estudiará este jueves la demanda que un trabajador a impuesto sobre Renfe Fabricación y Mantenimiento a causa de la enfermedad profesional que padece: un cáncer de pulmón provocado por la exposición amianto. El antiguo empleado reclama 317.547,57 euros a en concepto de daños y perjuicios.
Según ha informado Asviamie, Asociación vasca de víctimas del amianto, el demandante trabajó como tornero en la empresa FEVE (Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha), más tarde Renfe Operadora entre 1981 y diciembre de 2021, cuando enfermó. Según el informe médico del Hospital de Cruces, de 22 de febrero de 2021, al operario le diagnosticaron un carcinoma pulmonar, siendo sometido a lobectomía superior izquierda. En febrero de 2022, el INSS dictó resolución concediéndole una Incapacidad Permanente Total, derivada de enfermedad profesional.
Los puestos de trabajo ocupados por éste en la empresa, implicaron el contacto con fibras de amianto. Dado que el puesto de trabajo se situaba en el Taller de fabricación y mantenimiento de las Unidades de vía estrecha de la Zona Norte en Balmaseda, su trabajo consistía en el torneado de ruedas, mecanizado de discos de freno, discos de embrague. Si bien, era un puesto polivalente, dado que realizaba otras tareas.
El trabajador realizaba diversas tareas con amianto. Todas eran manuales, con el uso de martillo y cincel para su retirada
Los ferodos de freno y embragues tenían amianto en su composición. La manipulación de dichos elementos implicaba liberar fibras cancerígenas al espacio de trabajo del operario. Asimismo, otros trabajadores se dedicaban a cortar, lijar las pastillas de freno y embragues, utilizando aire a presión para la limpieza del puesto de trabajo, incluidas las zapatas de freno y embragues, provocando una importante dispersión de las fibras cancerígenas, que serían inhaladas por éste y el resto de los trabajadores o personas presentes.
El amianto era también utilizado para recubrir los tubos de escape de las maquinas, de forma qué, para realizar trabajos de reparación, retiraban el revestimiento de amianto, colocando posteriormente, material nuevo. Operación qué, por el grado de degradación del amianto, implicaba nueva dispersión de fibras cancerígenas al ambiente de trabajo. El enfermo también se dedicó a sustituir las calderas de vapor de las maquinas, en cuyo aislamiento también se utilizaba el amianto. Todas las operaciones realizadas con el amianto eran manuales, con el uso de martillo y cincel para su retirada.
Esta exposición al amianto se produjo sin que la empresa adoptara las medidas de seguridad que la ley exigía
Según consta en el informe de Osalan 18-02-22, el trabajador figura en el "Fichero de trabajadores posiblemente expuestos al amianto de Euskadi, como consecuencia de las tareas realizadas en taller de material remolcado en el Taller de Balmaseda, siendo trabajador deFEVE-RENFE".
Esta exposición al amianto se produjo sin que la empresa adoptara las medidas de seguridad que la ley exigía, por lo que el trabajador permaneció en contacto con el amianto de forma incontrolada. Aquello recavó en una enfermedad oncológica. Por esa razón, reclama en concepto de daños y perjuicios la cantidad de 317.547,57 euros.
Asviamie, Asociación vasca de víctimas del amianto, se concentrará a las 11.00 horas de este jueves, frente a los Juzgados de Bilbao, en apoyo de la demanda y para reclamar rigurosas medidas seguridad en las empresas, frente a los riesgos de las múltiples sustancias cancerígenas presentes en el ámbito laboral.