El Parlamento de Navarra ha celebrado este lunes 14 de agosto la primera ronda de lo que será la investidura de la candidata del PSN, María Chivite, como nueva presidenta de la comunidad foral para los próximos cuatro años. Una reelección que no se hará efectiva hasta mañana en la segunda ronda de votaciones, con una mayoría simple, tras no haberlo logrado esta tarde al recibir el voto en contra de UPN, PPN y Vox, 20 votos en total, frente a los 21 apoyos que ha sumado de PSN, Geroa Bai y Contigo Navarra. EH Bildu se ha abstenido. Esta primera votación requería de mayoría absoluta (26 parlamentarios).
La Consejería de Sanidad quedará en manos de Fernando Domínguez Cunchillos (Geroa Bai), quien ya fuera consejero de esta cartera entre 2015 y 2019
A partir de mañana, la abstención de los parlamentarios de EH Bildu sí habilitará que se haga oficial la mayoría simple que dará el chupinazo de inicio del nuevo mandato político en Navarra. El pacto de legislatura para un Gobierno de coalición recoge que ocho de los trece departamentos quedarán en manos socialistas, cuatro serán para Geroa Bai y uno para Contigo. En concreto, la consejería de Salud quedará en manos de Fernando Domínguez Cunchillos(Geroa Bai), quien ya fuera consejero de esta cartera entre 2015 y 2019, y llevará las riendas de la política sanitaria de la región.
COMPROMISO CON LA SANIDAD
El pleno ha servido para que María Chivite remarque las líneas programáticas que recoge su acuerdo de Gobierno para la Sanidad, entre las cuales resalta “la importancia de unos servicios públicos que sean garantes de la igualdad de oportunidades”. En esta línea, uno de los “focos esenciales será la Sanidad, en especial la Atención Primaria”, para lo cual será necesario establecer estrategias “con audacia” y basadas en la “transformación digital y las nuevas tecnologías”.
Chivite considera que próximamente ha de aprobarse una “Ley Foral de Salud”, para lo cual se presentará un proyecto legislativo “antes de que acabe el año 2024”
La pasada legislatura estuvo marcada por la crisis sanitaria que supuso la Covid-19, por ello, “la Sanidad va a ser una cuestión nuclear en esta legislatura, especialmente tras la “traumática situación que supuso la pandemia”; la cual “hizo aflorar con más crudeza las deficiencias que ya se venían observando en la Sanidad pública y ha recordado la urgencia de actuar para reimpulsar y modernizar el sistema sanitario”, ha remarcado.
Una apuesta por la Salud que debe hacerse desde “el prisma de la adaptación a los nuevos retos que supone el siglo XXI”. Por todo ello, Chivite, considera que próximamente ha de aprobarse una “Ley Foral de Salud”, para lo cual se presentará un proyecto legislativo “antes de que acabe el año 2024”. Una norma que, admite, “quedó pendiente durante la pasada legislatura”, y con la que pretende asegurar un sistema sanitario público “universal, equitativo, solidario e igualitario”.
La socialista resaltó "el abordaje de las listas de espera, un uso racional de los servicios de salud, la atención integral y sociosanitaria, la necesaria reforma y refuerzo de la Atención Primaria"
Del mismo modo, entre los principales objetivos de cara al nuevo mandato que comienza, la socialista resaltó “el abordaje de las listas de espera, un uso racional de los servicios de salud, la atención integral y sociosanitaria, la necesaria reforma y refuerzo de la Atención Primaria o la organización hospitalaria centrada en la persona y con una evaluación enfocada en los resultados”. Del mismo modo, la próxima presidenta navarra no olvidó otros desafíos como “la salud mental, especialmente en el ámbito infanto-juvenil o el impulso de la investigación y la medicina personalizada”.
Del mismo modo, serán cuatro años en los que se continuará le “inversión en infraestructuras, la consolidación de la empresa pública de transporte sanitario y la ampliación de servicios en salud bucodental”. Todos estos desafíos por delante quedarán, no obstante, en manos del próximo consejero de Salud en la región, Fernando Domínguez Cunchillos.