La hospitalización a domicilio crece en Navarra un 128%

El número de camas disponibles es actualmente de 140, más del doble que en 2015, lo que ha permitido extender este modelo de atención a toda la geografía navarra.

La actividad de la hospitalización a domicilio en Navarra ha pasado de 1.732 ingresos al comienzo del periodo a 3.959 en 2017
22 enero 2018 | 10:05 h
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La actividad de la hospitalización a domicilio ha crecido un 128% en el periodo entre 2015 y 2017, pasando de 1.732 ingresos al comienzo del periodo a 3.959 en 2017, simultáneamente al incremento en el número de camas disponibles en esta modalidad asistencial, que ha crecido un 115%, alcanzando las 140 actuales.

Este crecimiento de la hospitalización a domicilio ha permitido su extensión a toda la geografía navarra. En concreto, actualmente la distribución de camas por hospitales de referencia en cada una de las áreas de salud es la siguiente: Pamplona (Complejo Hospitalario de Navarra), 96 camas; Tudela (Hospital Reina Sofía), 30; y Estella (Hospital García Orcoyen), 14.

El porcentaje de crecimiento con respecto a la hospitalización convencional pasa del 3,11% en 2015 al 7,14% en 2017

El porcentaje de crecimiento con respecto a la hospitalización convencional pasa del 3,11% en 2015 al 7,14% en 2017. Se ha duplicado igualmente el número de estancias: 34.293 en este último año frente a 15.381 en 2015. La estancia media apenas sufre variación: 8,7 frente a 8,9.

El desglose de datos por hospitales de referencia indica que la hospitalización a domilicio en el Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) ha crecido un 224% (de 903 ingresos a 2.929); en el Hospital Reina Sofía, el incremento es del 20% (de 574 a 689) y en el Hospital García Orcoyen, del 33,7% (de 255 a 341). Las estancias se han incrementado igualmente: en el CHN, de 7.731 a 24.342; en el Reina Sofía, de 5.886 a 6.997; y en el García Orcoyen, de 1.764 a 1.839.

VENTAJAS DE LA HOSPITALIZACIÓN A DOMICILIO

La hospitalización a domicilio es un modelo asistencial capaz de dispensar cuidados médicos y de enfermería propios de un centro hospitalario a los pacientes en su domicilio, en el momento en el que ya no precisan de la infraestructura hospitalaria, pero todavía necesitan vigilancia médica activa y asistencia compleja. Entre las patologías susceptibles de ser tratadas por los equipos de hospitalización a domicilio destacan la insuficiencia cardiaca, reagudizaciones de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y asma, neumonías, enfermedad tromboembólica venosa, determinadas infecciones (respiratorias, digestivas, osteoarticulares, dermatológicas o de tejidos blandos, urinarias, etc.) o abscesos hepáticos, entre otras. También se realizan curas complejas, se suministra nutrición parenteral transitoriaen espera de cirugía o cuidados paliativos en enfermedades terminales.

Esta forma de hospitalización permite un mejor uso de los recursos sanitarios y mejora la coordinación entre los equipos profesionales de Atención Primaria y Atención Especializada

Comporta numerosas ventajas con respecto a la hospitalización convencional, ya que la convalecencia se realiza en un entorno conocido y más cómodo, en compañía de los familiares (que se ven liberados de la carga de desplazamientos y noches de cuidados en el hospital), evita las infecciones adquiridas en el centro hospitalario, los pacientes se desorientan menos y la recuperación funcional es más rápida. Además, esta forma de hospitalización permite un mejor uso de los recursos sanitarios y mejora la coordinación entre los equipos profesionales de Atención Primaria y Atención Especializada.

El paciente que opta por este tipo de hospitalización debe cumplir una serie de requisitos, aceptar voluntariamente el ingreso después de recibir toda la información, vivir en el área de cobertura del servicio y convivir con una persona con plenas capacidades y disponible para atenderle durante su convalecencia (cuidador o cuidadora).

El equipo de hospitalización a domicilio visita al paciente periódicamente y realiza en el domicilio las pruebas diagnósticas necesarias, como análisis, electrocardiograma, monitorización de la presión arterial, saturación de oxígeno, etc. Igualmente se realizan procedimientos terapéuticos como tratamientos antibióticos intravenosos, nutrición artificial, oxigenoterapia, curas complejas y transfusiones de sangre, siempre con las mismas garantías de atención y seguridad que en el centro hospitalario.

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