El consejero de Salud de Navarra, Fernando Domínguez, ha enviado al ministro de Sanidad en funciones, Alfonso Alonso, un escrito en el que solicita la convocatoria urgente del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) para abordar la situación creada ante la entrada en vigor el pasado diciembre del Real Decreto de Prescripción Enfermera.
El Gobierno de Navarra manifestó en su momento el rechazo al Real Decreto de prescripción, alegando que "resulta de difícil aplicación en la práctica diaria, al no estar elaborados ni aprobados los protocolos y las guías necesarios, lo que provoca inseguridad jurídica en los profesionales". Considera, además, que no responde a los criterios aprobados en su día por el Consejo Interterritorial y que fue modificado de forma unilateral. Todo ello puede, en opinión de los responsables de Salud, mermar la calidad asistencial.
VALENCIA, TAMBIÉN
Junto a Navarra, también se oponen al Real Decreto de prescripción otras autonomías como Extremadura o Cantabria, que ya han anunciado que intentarán recurrir la normativa ante el Tribunal Supremo, así como Valencia, que fue de las últimas en pedir también a Sanidad que convoque el Interterritorial y paralice la aplicación del decreto.
El texto, según la Generalitat valenciana, supone "importantes cambios que alteran las competencias del colectivo de la enfermería en cuanto a prescripción de fármacos y puede alterar la necesaria coordinación con el colectivo médico".
El pleno del Interterritorial puede reunirse cuando lo solicite la tercera parte de sus miembros
Se suma así a la solicitud realizadapor varias comunidades autónomas; en este sentido, cabe recordar que el pleno del CISNS puede reunirse cuando lo solicite la tercera parte de sus miembros. En el escrito, el consejero Domínguez propone, además, una moratoria en la aplicación de dicha normativa mientras se alcanza el consenso necesario entre los distintos colectivos profesionales afectados, de manera que el texto legal sea compatible con el pleno ejercicio de las competencias de los profesionales.El Gobierno de Navarra manifestó en su momento el rechazo al Real Decreto de prescripción, alegando que "resulta de difícil aplicación en la práctica diaria, al no estar elaborados ni aprobados los protocolos y las guías necesarios, lo que provoca inseguridad jurídica en los profesionales". Considera, además, que no responde a los criterios aprobados en su día por el Consejo Interterritorial y que fue modificado de forma unilateral. Todo ello puede, en opinión de los responsables de Salud, mermar la calidad asistencial.
VALENCIA, TAMBIÉN
Junto a Navarra, también se oponen al Real Decreto de prescripción otras autonomías como Extremadura o Cantabria, que ya han anunciado que intentarán recurrir la normativa ante el Tribunal Supremo, así como Valencia, que fue de las últimas en pedir también a Sanidad que convoque el Interterritorial y paralice la aplicación del decreto.
El texto, según la Generalitat valenciana, supone "importantes cambios que alteran las competencias del colectivo de la enfermería en cuanto a prescripción de fármacos y puede alterar la necesaria coordinación con el colectivo médico".