Intervienen de forma pionera y con una novedosa técnica quirúrgica a dos pacientes diagnosticados de reflujo gastroesofágico con buenos resultados, mejorando su calidad de vida. Así lo han hecho los especialistas de la Unidad Esófago-Gástrica del Servicio de Cirugía General y Aparato Digestivo del Hospital Universitario de Cartagena.
Se trata del primer hospital en la Región que aplica esta técnica a través de un procedimiento mínimamente invasivo, que presenta diferencias con respecto a la cirugía tradicional, reduciendo los síntomas postoperatorios como la dificultad para tragar y eructar.
Requiere una estancia hospitalaria menor que la de las intervenciones tradicionales, 24 horas, y reduce los síntomas colaterales que estas pueden ocasionar
Para realizar esta técnica, los profesionales que componen la Unidad Esófago-Gástrica han tenido que realizar formación específica en el hospital Klinik Beau-Site de Berna (Suiza), de la mano del profesor Jörg Zehetner, experto europeo líder en la extensión de esta técnica quirúrgica y responsable del registro europeo sobre esta actividad.
La intervención se lleva a cabo mediante laparoscopia e implica el implante de un dispositivo de silicona médica que permite mantener la unión entre el esófago y el estómago en una posición intraabdominal, lo que es fundamental para preservar la competencia del esfínter. Generalmente requiere una estancia hospitalaria menor que la de las intervenciones tradicionales, 24 horas, y reduce los síntomas colaterales que estas pueden ocasionar.
El 15 % de la población española presenta síntomas frecuentes de reflujo como acidez o regurgitación de alimentos
La experiencia en otros hospitales a nivel internacional y nacional es que ofrece excelentes resultados en el control del reflujo, especialmente en la reducción de la dificultad para tragar, eructar o vomitar, además de la distensión abdominal.
El reflujo gastroesofágico es una patología muy frecuente en la población, debido a distintos trastornos anatómicos y funcionales, incrementados con determinados hábitos de vida (estrés, obesidad, ingerir comidas grasientas, sedentarismo). El 15 % de la población española presenta síntomas frecuentes de reflujo como acidez o regurgitación de alimentos y, en algunos casos, puede producir importantes daños en el tejido esofágico como esofagitis, con riesgo de convertirse en malignos.
El tratamiento de esta patología es inicialmente médico; sin embargo, si no se controla con fármacos y el paciente sufre un grado de reflujo que deteriora su calidad de vida, existen alternativas terapéuticas mediante cirugía.