Con motivo de la conmemoración por el Día Mundial Sin Alcohol, la Consejería de Salud se ha sumado a la campaña europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de la difusión del boletín monográfico 'Promopreve', según informaron fuentes de la Comunidad en una nota de prensa.
La campaña europea lleva por título #RedefineAlcohol, tiene por objetivo hacer un llamamiento a reflexionar sobre la relación personal y social del alcohol y concienciar acerca de los riesgos para la salud y los peligros ocultos de su consumo. La Consejería de Salud ha recordado que evitar el consumo de bebidas alcohólicas es la mejor forma de prevenir numerosas enfermedades, entre ellas, varios tipos de cáncer, incluidos los de mama y colon, según informaron fuentes de la Comunidad en una nota de prensa.
El alcohol está relacionado con más de 200 enfermedades, entre ellas al menos siete tipos de cáncer
Según datos de la OMS, el alcohol está relacionado con más de 200 enfermedades, entre ellas al menos siete tipos de cáncer, y su consumo se considera responsable directo del 8,8% del total de muertes en Europa. A pesar de estos graves riesgos para la salud y sus consecuencias perjudiciales, menos de la mitad de la población europea es consciente de la relación entre el alcohol y el cáncer.
El boletín monográfico incluye las últimas investigaciones sobre los impactos de esta bebida en la salud, así como consejos para su abordaje desde la Atención Primaria.
"Tomar conciencia sobre los riesgos para la salud y los peligros del consumo de alcohol podemos escoger opciones más saludables", ha explicado el director general de Salud Pública, José Jesús Guillén, quien ha resaltado que "entre otros beneficios, reducir el consumo de alcohol puede mejorar la memoria, el aspecto, las relaciones sociales, la calidad del sueño y disminuir el riesgo de desarrollar cáncer".
Tal y como lo define la OMS, esta bebida es una sustancia psicoactiva que en un primer momento puede dar sensación de euforia, pero después genera un efecto neurodepresor del sistema nervioso central y su consumo continuado puede desencadenar dependencia.
Guillén ha añadido que "existe una relación directa entre la cantidad de alcohol consumida y el riesgo de desarrollar la enfermedad o morir a causa de ella: cuanto más alcohol se bebe, mayor es el riesgo". Este riesgo es acumulativo, por lo que cuanto más tiempo se consume, mayor es la probabilidad de desarrollar cánceres relacionados con el alcohol, como los de mama, colon, hígado, boca, garganta y esófago, han recordado desde la Consejería de Salud.
CONSUMO DIARIO DE ALCOHOL EN LA REGIÓN
Las principales sustancias consumidas en 2022 en la población entre 15 y 64 años de la Región fueron el alcohol y el tabaco, según las conclusiones de la Encuesta sobre Alcohol y Drogas en la Región de Murcia (Edades 2022), si bien este estudio reveló que el consumo diario de alcohol ha disminuido, al pasar de un 13% en 2020 a un 9% en 2022.
La Consejería desarrolla intervenciones educativas como el programa 'Argos' de prevención del consumo de bebidas alcohólicas, tabaco y cannabis de la Región de Murcia. Esta iniciativa se dirige a la población adolescente de primero y segundo curso de Educación Secundarua Obligatoria (ESO) a través de los centros educativos.
Una serie de defectos congénitos que incluyen discapacidades físicas, mentales, conductuales o de aprendizaje
Asimismo, en los últimos años, ha lanzado dos campañas de sensibilización, una para la prevención del Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF) y otra para acompañar y apoyar a la mujer embarazada en la prevención del TEAF. Un término general para una serie de defectos congénitos que incluyen discapacidades físicas, mentales, conductuales o de aprendizaje con posibles implicaciones de por vida y que, a diferencia de muchas otras discapacidades, son cien por cien evitables si la mujer no consume alcohol durante su embarazo.
Asimismo, consumir alcohol afecta negativamente a la salud mental, aumenta el riesgo de desarrollar problemas de esta índole, como la depresión y la ansiedad y empeora las afecciones. Puede provocar cambios de humor, comportamiento impulsivo y elevar el riesgo de autolesión y suicidio y alterar los patrones de sueño, así como afectar el funcionamiento social y laboral.