El presidente del Gobierno de La Rioja, José Ignacio Ceniceros, se ha reunido este viernes con los responsables de la Estrategia Riojana contra la Hepatitis C, Begoña Sacristán y José Ignacio Torroba. En el encuentro han participado también la consejera de Salud, María Martín, y el director del Área de Salud, José Miguel Acítores.
El jefe del Ejecutivo regional ha anunciado que “La Rioja ha alcanzado ya el objetivo establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para controlar la hepatitis C, antes del 2030, al haber diagnosticado a más del 90% (91,1%) del total de personas que padecen esta enfermedad en nuestra comunidad”.
Finalmente se ha cumplido todavía dos años antes gracias a la aplicación de los medicamentos más eficaces y a un gran trabajo de cribado sobre la población, entre otros factores
En concreto, la OMS estableció el objetivo de diagnosticar al 90% de los casos posibles, aplicar tratamiento al 80% de ellos y obtener una reducción de la mortalidad del 65%. En el caso de La Rioja hasta el momento se ha tratado a 1.144 personas con una tasa de éxito del 97% con el primer tratamiento.
Asimismo, Ceniceros ha explicado que La Rioja ya había adelantado el cumplimiento de este objetivo al año 2020 y “finalmente se ha cumplido todavía dos años antes gracias a la aplicación de los medicamentos más eficaces; a un gran trabajo de cribado sobre la población; a la divulgación de una cultura de la prevención en los grupos de mayor riesgo, y a una gran coordinación entre todos los niveles asistenciales”.
“Se trata de un logro colectivo que no es fruto de la casualidad sino de una estrategia sanitaria firme y comprometida con la eliminación de esta enfermedad”, ha señalado Ceniceros, quien ha recordado que la hepatitis C se descubrió en los años 90 y que, a día de hoy, aún no se dispone de una vacuna que la prevenga por lo que durante todo este tiempo se han aplicado diferentes estrategias y tratamientos.
En este sentido, el presidente del Gobierno riojano ha apuntado que “es en los últimos años, con la aparición de los medicamentos antivirales de segunda y tercera generación, y su aplicación combinada de manera personalizada para cada paciente, cuando se han conseguido índices de éxito por encima del 90%”. La Rioja ostenta el primer lugar en España en tratamientos iniciados por habitante con fármacos de tercera generación (2,57 pacientes por cada 1.000 habitantes frente a la media nacional de 1,43).