La consejera de Salud de La Rioja, María Martín, ha anunciado este miércoles que el sistema público de salud de la autonomía incorporará en su cartera de servicios, a lo largo de este año, el sistema de monitorización de glucosa mediante sensores (tipo flash) con el fin de mejorar el tratamiento, la seguridad y la calidad de vida de los menores con diabetes.
Martín ha señalado que la inclusión de esta tecnología en La Rioja se encuadra en el marco de un estudio coordinado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y las comunidades autónomas. El acuerdo fue presentado al pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) el pasado abril y se rubricará próximamente con la firma de un protocolo entre todas las partes implicadas.
"Este sistema permitirá al paciente mejorar en el conocimiento de su enfermedad y saber cómo actuar ante las situaciones cotidianas de su vida"
La población objeto de estudio serán niños de entre cuatro y 17 años con diabetes tipo 1 (DM1) que requieran múltiples dosis de insulina y más de seis controles de glucemia al día. En La Rioja se estima que hay cerca de 90 menores en esta situación y que, por tanto, se verán beneficiados con este servicio. Asimismo, dado que se trata de un estudio que requiere seguimientos, se continuarán dando los sensores y el lector electrónico a los usuarios que cumplan los 18 años a lo largo del estudio, que durará previsiblemente unos tres años.
La prescripción de los sensores estará coordinada en La Rioja por los servicios de Pediatría y Endocrinología del Hospital San Pedro, el primero para los menores de 14 años y el segundo para el tramo de edad comprendido entre los 14 y 17 años.
La máxima responsable de la salud pública de la región ha recalcado que con el nuevo sistema "se reducirán los pinchazos para la medición de la glucosa en sangre", además de ofrecer "más seguridad" a los enfermos con este trastorno metabólico. Del mismo modo, Martín ha señalado que este novedoso sistema permitirá al paciente "mejorar en el conocimiento de su enfermedad y saber cómo actuar ante las situaciones cotidianas de su vida".
"La educación es esencial en el abordaje terapéutico de la diabetes, ya que mejora el control metabólico, favorece la adherencia al tratamiento y contribuye a prevenir las complicaciones agudas y crónicas"
A este respecto, la titular de Salud ha subrayado que "la educación es esencial en el abordaje terapéutico de la diabetes, ya que mejora el control metabólico, favorece la adherencia al tratamiento y contribuye a prevenir las complicaciones agudas y crónicas. Además reduce las hospitalizaciones, el consumo de recursos sanitarios que esta patología ocasiona, y ayuda a disminuir la ansiedad y la incertidumbre, al mismo tiempo que reduce el impacto que supone el diagnóstico de una enfermedad crónica".
El sistema flash mide el nivel de glucosa en el líquido intersticial y la tendencia en las últimas ocho horas. El usuario solo tiene que pasar un lector electrónico sobre un parche sensor que tiene colocado en el brazo. El paciente puede así prescindir, en parte, de los pinchazos en el dedo. Sin embargo, la exactitud de sus mediciones es inferior a las de las glucemias capilares. La medida supondrá una inversión de 117.000 euros anuales para la obtención de los sensores, 26 para cada menor.