Gerente del Servicio Riojano: "A fecha de hoy no podemos operar más de lo que estamos operando"

Jesús Alvarez, gerente del SERIS, apoya la necesidad de derivar operaciones a la privada en que "el sistema no es suficiente"

Quirófano del Hospital San Pedro (Foto: EP/GOBIERNO DE LA RIOJA)
27 octubre 2023 | 12:55 h

La saturación de la Atención Primaria es una de las razones que explican los retrasos en las intervenciones en los hospitales de La Rioja, que se ven saturados y con una larga lista de espera. Actualmente, 9.276 pacientes están pendientes de ser intervenidos. El gerente del Servicio Riojano de Salud (SERIS), Jesús Álvarez, ha asegurado hoy, en relación a la decisión tomada de derivar operaciones a Los Manzanos: "A fecha de hoy, no podemos operar más de lo que estamos operando".

Álvarez, en un encuentro con los medios de comunicación, ha explicado cómo todas las operaciones que el SERIS no sea capaz de asumir se derivarán a la sanidad privada pero, ha visto, seguirá siendo "sanidad pública, porque se paga con los impuestos de los riojanos". "Siempre", ha garantizado, se "exigirán los mismos criterios de calidad" y, además, las derivaciones no se plantean para todos tipo de intervenciones, sólo para aquellas con menor complejidad, "y desde luego nunca intervenciones que requieran una unidad de medicina intensiva en el postoperatorio". Además, ha explicado, "toda la información clínica que requiere un paciente para ser intervenido se pasa al centro concertado" y, después de la operación, este centro devuelve toda la información clínica para ser incluida en el sistema informático público.

Preguntado acerca de si sería posible invertir el dinero que se va a derivar a la sanidad privada en aumentar las posibilidades del Servicio Público de Salud, ha afirmado que "el poner en marcha, por ejemplo, diez quirófanos más, sería un proyecto a más de dos años vista y, durante estos dos años, habría 5.000 riojanos más pendientes de ser intervenidos quirúrgicamente"; algo que ha visto "inaceptable".

"El sistema tal como está no es suficiente, claramente"

Por otro lado, ha visto que "el sistema no puede estar dimensionado para todos los picos y los valles", dado que "la demanda no es continua" y, "a lo largo del tiempo, hay veces que aumenta la demanda y otras que disminuye". "Lo que sí que puedo decir alto y claro", ha añadido, "es que a fecha de hoy no podemos operar más de lo que estamos operando". "Ahora mismo", ha añadido, "el sistema tal como está no es suficiente, claramente".

Ha aseverado ante las críticas de la Plataforma por la Sanidad Pública con respecto a que no se cumplen los criterios para derivar a la privada: "Si hace falta estar colapsados y estar con pacientes en los pasillos" (para llegar a usar la privada) "pues es un criterio que yo desde luego no comparto". Con respecto al paciente que exija ser operado en la pública ha asegurado que "se respetará su decisión", pero "tendrá que esperar más tiempo". Esto, ha garantizado, no significa que se le baje de puesto en la lista, "o se le penalice". "Únicamente que, si le planteas la posibilidad de que se opere en un sitio y no se quiere operar, pues probablemente le tocará esperar más. Pero nada más. Por supuesto que les operaremos y en tiempo y forma, con los mismos derechos que cualquier otro", ha afirmado.

PLAN DE CHOQUE

El objetivo a largo plazo, ha dicho, es reducir la lista de espera a entre cuarenta y cincuenta días "de demanda media". A día de hoy, ha informado, está en 112 días y cuando empezó la legislatura estaba en 123 días, una cifra que se ha reducido con un "plan de choque" en el servicio público.

El plan de choque se concreta en dos quirófanos de oftalmología de lunes a jueves y varios quirófanos en jornada de tarde con presencia de anestesiólogo, también de lunes a jueves, así como quirófanos en doble jornada los sábados, desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la tarde. Este plan de choque se puso en marcha el 1 de octubre y, a fecha de hoy, ha asegurado, se están "viendo los resultados". Así, se ha operado, como actividad extraordinaria, 880 pacientes y eso supone un aumento del 31 por ciento en la actividad total del servicio riojano de salud. "A partir de ahí", ha añadido, "y siendo conscientes de que la situación es compleja y difícil, hemos puesto también en marcha el procedimiento administrativo para, el año que viene, derivar pacientes, siempre que sea necesario, a la iniciativa privada".

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