La Unidad de Angiogénesis del Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (Cibir), liderada por el doctor Alfredo Martínez, ha identificado con éxito un nuevo mecanismo molecular que puede explicar cómo se produce la pérdida de memoria en la edad avanzada y un posible tratamiento contra este proceso.
Así lo ha anunciado este lunes la consejera de Salud de La Rioja, María Martín, en una rueda de prensa en la que ha estado acompañada por el director gerente de la Fundación Rioja Salud, Javier Aparicio, y el propio Alfredo Martínez, y en la que se ha dado a conocer el resultado de la investigación, publicada recientemente en la revista científica Frontiers in Molecular Neuroscience, en colaboración con el Departamento de Farmacología de la Universidad de Navarra.
Martín ha asegurado que "la pérdida de memoria es uno de los principales problemas que afectan a las personas mayores, tanto en La Rioja como en el resto de España, y se agudiza en casos de enfermedades neurodegenerativas como es la enfermedad de Alzheimer". "Por este motivo, podemos hablar de un hallazgo de primer orden", ha explicado.
"La labor de estos profesionales, muchas veces callada, se traduce a futuro en mejores tratamientos, mejores fármacos, mejores servicios para las personas y, en consecuencia, una vida mejor"
En su trabajo, los investigadores han centrado su investigación en una proteína denominada adrenomedulina. Los científicos han comprobado que la expresión de esta proteína en el cerebro aumenta con la edad y se acrecienta aún más en personas con la enfermedad de Alzheimer.
De hecho, este aumento puede servir como un marcador para identificar a los pacientes en riesgo de evolucionar hacia un alzhéimer avanzado. Para entender cuál es la consecuencia fisiológica de este aumento, los investigadores han recurrido a un modelo de ratones modificados genéticamente de forma que no expresen la adrenomedulina en el cerebro.
Durante el proceso de investigación, los científicos del CIBIR observaron que los ratones ancianos que sí expresaban adrenomedulina presentaban pérdidas parciales de memoria, similares a las que afectan a personas mayores. Además, en los ratones estas pérdidas de memoria eran más marcadas en el sexo femenino, algo que también sucede en la especie humana.
Sin embargo, los ratones de ambos sexos que no expresan la proteína mantenían unos niveles de memoria idénticos a los ratones jóvenes, indicando que la adrenomedulina participa activamente en la pérdida de memoria asociada a la edad.
Martín ha felicitado a los responsables del trabajo por su investigación, y les ha alentado a seguir "sumando vidas". Porque, como ha recalcado la titular de Salud "la labor de estos profesionales, muchas veces callada, se traduce a futuro en mejores tratamientos, mejores fármacos, mejores servicios para las personas y, en consecuencia, una vida mejor".