El Centro de Transfusión de La Rioja ha puesto en marcha una nueva técnica de detección mediante analítica para identificar la carga viral de cuatro arbovirus, es decir, infecciones transmitidas por mosquitos como el virus del Nilo Occidental, el dengue, zika y chikungunya. Se trata de la segunda comunidad autónoma, después de Cataluña, donde se ha puesto en marcha esta analítica para la que se invertirán 50.000 euros anuales para la compra de reactivos.
El gerente de la Fundación Rioja Salud, Juan Carlos Oliva, ha anunciado esta nueva técnica en su visita al Banco de Sangre, acompañado del director técnico del centro, Carlos Sola. Oliva sostiene que, con la aplicación de esta técnica, "se podrán conseguir mil donaciones anuales más de donantes que hasta ahora eran excluidos temporalmente".
"Se podrán conseguir mil donaciones anuales más de donantes que hasta ahora eran excluidos temporalmente"
Esta analítica ya se está utilizando en personas que han viajado a zonas con más prevalencia de casos de estos aborvirus. De esta forma se podrá ampliar la base de donantes de sangre que, hasta ahora exlucía automáticamente de la donación de sangre a quienes habían viajado a zonas de riesgo hasta 28 días después de su regreso.
Si aparece una analítica positiva de un donante, se comunicará a la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de La Rioja para que lleve a cabo la investigación epidemiológica correspondiente.
231 EXCLUSIONES A DONANTES
Gracias a esta nueva técnica es posible detectar cuatro virus que pueden transmitirse por transfusión sanguínea y provocar infecciones asintomáticas o casos mucho más graves con resultado de muerte. Pero únicamente detecta esos cuatro arbovirus, por lo que se mantienen las exclusiones temporales de 6 meses para quien viaje a zona con riesgo de chagas y de 12 meses si la zona tiene riesgo de malaria.
En lo que va de año se han registrado un total de 231 exclusiones. No obstante, hay personas que puede que no hayan acudido a donar al ser ya conocedoras de la exclusión temporal tras volver de dichas zonas. Además, esta cifra se mantiene con tendencia similar al año anterior, ya que en el total de 2023 se registraron en La Rioja 466 exclusiones temporales de donantes que habían visitado zonas de riesgo.
La intensa actividad quirúrgica realizada en el sistema hospitalario riojano ha reducido la reserva de hematíes, por lo que desde el Banco de Sangre se vuelve a hacer un llamamiento a la población a la donación. En paralelo se implantan nuevas técnicas, como esta analítica, para ampliar la base de donantes.
"Pese al periodo en el que estamos, la actividad en el Hospital no ha parado, hay muchas operaciones programadas y extraordinarias, y pacientes con quimioterapia que necesitan sus plaquetas y hematíes, por lo que hacemos un llamamiento a las personas que no estén de vacaciones; que se acuerden de los pacientes que necesitan transfusiones de sangre y que se acerquen a donar", ha concluido Carlos Sola.