Desde entonces, tan sólo han sido cuatro comunidades más las que se han unido a la receta electrónica interoperable, aunque algunas tampoco lo han hecho de manera completa. Es el caso de Castilla-La Mancha, que es emisora de estas recetas desde junio de 2016, pero aún no es receptora (se espera que se incorpore en este mes de marzo). Por su parte, Navarra se ha unido a ambos grupos desde septiembre de 2016.
Según la fecha en que iniciaron la fase de pruebas, las próximas CC.AA. en incorporarse al proyecto de interoperabilidad serían Asturias y Murcia
Las últimas comunidades que se han incorporado a esta medida han sido la Comunidad Valenciana, en febrero de 2017, y Galicia, en este mes de marzo. Aunque estas dos regiones son ya emisoras y receptoras, según ha apuntado recientemente el Ministerio de Sanidad, no pueden todavía realizar dispensaciones de Castilla-La Mancha.Según anunció recientemente el Ministerio, y como han confirmado a ConSalud.es desde el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, la previsión es que esta región sea la séptima en unirse al proyecto entre los meses de abril y mayo.
De esta manera, una vez se incorpore Aragón serían siete las comunidades adscritas de un total de 17, es decir, el 41%, y quedarían, así, diez autonomías por implantar la receta electrónica interoperable. En una reciente intervención en el Congreso, la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, manifestó su voluntad de que “pronto” se incorporen el resto. No obstante, desde Sanidad no han puesto una fecha para su completa finalización y aluden a que esta tarea también le corresponde a las Consejerías de Sanidad y a los Colegios Oficiales de Farmacéuticos.
El Ministerio de Sanidad ha actualizado, el 6 de marzo, la situación de interoperabilidad de la receta electrónica en el SNS. Según la nueva previsión, sería Asturias la próxima región en incorporarse debido a que inició su fase de pruebas en septiembre de 2015. Asimismo, Murcia pasó a esta misma fase en enero de 2016, que junto con lascomunidades de Andalucía (agosto de 2016), Castilla y León (octubre de 2016), Cataluña y Madrid (noviembre de 2016), podrían ser las siguientes en obtener los certificados.
En el lado contrario se encontrarían las comunidades autónomas de Cantabria y Baleares, que iniciaron la fase de desarrollo en diciembre de 2014 y marzo de 2015 respectivamente pero que, según los datos de Sanidad, aún no han iniciado la fase de pruebas. Por su parte, el documento del ministerio no ofrece datos del País Vasco, mientras que en Ceuta y Melilla (INGESA) están en fase de pruebas desde septiembre de 2016.
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