El Servicio Extremeño de Salud (SES) ha sido condenado a indemnizar con un millón de euros a un niño y a su madre por una negligencia durante el parto que provocó parálisis cerebral al bebé. La senstencia ya es firme, después de que el SES renunciara a recurrir, por lo que la sanidad extremeña deberá pagar 750.000 euros al menor y 150.000 a su madre.
Durante el parto, el pasado 22 de mayo de 2017, y según informa la sentencia, hubo signos evidentes de sufrimiento fetal y no se hizo el manejo médico conforme a la evidencia científica actual. Al ingreso, presentaba un líquido amniótico meconial junto a un registro cardiotocográfico que ya era patológico desde las 14:18h. Este fue agravándose en las siguientes horas sin que se tomaran las medidas pertinentes.
A las 15:05h, aparecen deceleraciones tardías, seguidas de una deceleración precoz mantenida durante 60 segundos, hasta llegar a una bradicardia severa y sostenida alrededor de las 17:10.
La mala praxis durante el nacimiento ha sido la causante de que el pequeño Alejandro Núñez Mora padezca parálisis cerebral con una discapacidad del 55%
En estas circunstancias, estaría indicado hacer un pH fetal y finalizar urgentemente la gestación mediante cesárea. Sin embargo, se intentó un parto instrumental con ventosa que, según el informe, se realiza de forma contundente y reiterada por lo que el bebé presentó un cefalohematoma parietoocipital al nacer.
Una hora después de intentar el parto instrumental con ventosa sin éxito, el pequeño nace a través de una cesárea de urgencia a las 19:06h, casi cinco horas después de que se haya notificado sufrimiento fetal.
La letrada experta en negligencias médicas, Francisca Guillén Magida, concluye la sentencia después de casi tres años y tras demostrar que la mala praxis durante el nacimiento ha sido la causante de que el pequeño Alejandro Núñez Mora padezca parálisis cerebral con una discapacidad del 55%.