El consejero de Sanidad de Extremadura, José María Vergeles, ha hablado de la pretensión de su departamento de avanzar hacia la erradicación de la hepatitis C. Lo ha hecho en su intervención en la apertura de una Jornada Científica, organizada por la compañía de investigación biofarmacéutica Abbvie, donde profesionales sanitarios han reflexionado sobre la eliminación de dicho virus.
Vergeles ha explicado que, desde hace unos años, existe un tratamiento para el virus de la hepatitis C (VHC) que permite la desaparición de la enfermedad y ha recordado la inversión realizada por el SNS y también por el Servicio Extremeño de Salud: “Fuimos la segunda comunidad autónoma que empezó a tratar pacientes con VHC y en estos años hemos tratado a unas 1.600 personas con una inversión de alrededor de 30 millones de euros”, ha señalado.
En relación a los tratamientos, el consejero apuntaba que “son infinitamente más baratos que hace unos años”. En 2012 eran necesarios unos 45.000 euros por paciente, pero ahora los costes son más asumibles, por lo que declaró que “ha llegado el momento de que introduzcamos la tendencia a la erradicación, a la vez que nos adaptamos a laestrategia de la OMS con el objetivo 2030de cifras de reducción de las consecuencias de esta enfermedad”.
Este plan va de la mano con la adaptación a la estategia de la OMS para 2030 de reducir las consecuencias de la hepatitis C
Sin embargo, Vergeles ha precisado que “el futuro plan de erradicación no es algo que podamos hacer de manera indiscriminada a toda la población”. Para su ejecución se han identificado unos grupos de riesgo en función de las conductas, la vulnerabilidad social o la probabilidad de contraer el VHC por el ámbito en el que se encuentran. A estos grupos se dirige el plan, que deberá tener agilización analítica y la técnica del diagnóstico de un solo paso que el SES implantó en el Complejo Hospitalario Universitario de Cáceres, “con magnificos resultados”.
El consejero estima que alrededor de 3.400 pacientes pueden tener en Extremadura xerología positiva del virus, aunque luego habrá que ver los análisis para ver si está el VHC o cuál es su situación. “Será algo que tenemos que ir abordando de forma progresiva”, ha dicho.
Vergeles ha señalado que en esos grupos están aquellas personas que recibieron transfusiones de sangre o plasma antes de una determinada época en la que los métodos de esterilización no eran tan sofisticados como lo son ahora; personas en situación de vulnerabilidad como internos penitenciarios, aquellas personas que están en situación de vulnerabilidad, como los que están en las prisiones; o quienes hayan hecho uso de drogas por vía parenteral en algún momento de su vida.
“Hay que identificar todos los factores de riesgo para que finalmente podamos hacer ese plan de erradicación y que sea realmente eficiente”. Además, ha concluido, esa eliminación del VHC “nos permitiría aumentar las cifras de donación de órganos, de hígado, lo que es importante para nuestro país”, ha apuntado.