Este jueves ha tenido lugar la Comisión de Salud y Servicios Sociales en la Asamblea de Extremadura. La consejera de Salud y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, Sara García Espada, ha tenido la oportunidad de desgranar las principales líneas de actuación de su consejería.
Sara García Espada ha explicado que algunas de las principales líneas de actuación de la consejería pasan por alcanzar un pacto por la sanidad y la aprobación de una nueva Ley de Salud, además de un plan estratégico de reducción de listas de espera. En este sentido, la consejera ha anunciado un plan estratégico de reducción de listas de espera para lo que se establecerá un sistema de listas única y voluntaria con el objetivo de que los usuarios tengan la opción de ser atendidos en otra área distinta a la de su pertenencia.
Otro de los planes a poner en marcha es el de Retención y Atracción de los sanitarios, que pasará por evitar la precariedad laboral y las situaciones de saturación asistencial, lo que redundará en una gestión sanitaria eficiente en cualquier centro sanitario de la comunidad.
Las principales líneas de actuación de la consejería serán un pacto por la sanidad, la aprobación de una nueva Ley de Salud y un plan estratégico de reducción de listas de espera
Además, ha destacado que se iniciará un plan estratégico de salud mental con la creación de una Unidad de Salud Mental en el Hospital Universitario de Cáceres, entre otras acciones. En lo que a dependencia, discapacidad y servicios sociales se refiere, Sara García ha manifestado que es una prioridad mejorar la aplicación de la Ley de Dependencia en la comunidad, avanzando en su aplicación y además se comenzarán los trámites para la puesta en marcha del Centro de Atención a la Discapacidad de Extremadura (CADEX) en la ciudad de Mérida, con el que se dará respuesta a una demanda permanente de usuarios y ciudadanos.
Igualmente, Espada ha anunciado que, este año, la región perderá más de 12 millones de euros en fondos destinados al Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia. La consejera ha achacado esta pérdida al anterior gobierno de la comunidad.
"Estos fondos, esenciales para apoyar a las personas dependientes, se han perdido debido a la incapacidad del gobierno anterior del PSOE para justificar el gasto mínimo acordado para el año 2022 ante el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, concretamente ante el IMSERSO", ha criticado. A sus ojos, se trata de "una mala planificación" del gasto de ese año, que debía alcanzar los 13,5 millones de euros, pero que "no se logró justificar adecuadamente".
Se iniciará un plan estratégico de salud mental con la creación de una Unidad de Salud Mental en el Hospital Universitario de Cáceres
Esta decisión significa que, para el año 2023, Extremadura habría tenido la posibilidad de disponer de 23 millones de euros para destinar a las personas dependientes, pero sólo se podrán destinar 11 millones de euros. "No es entendible", ha incidido, "que, debido a la falta de justificación económica por parte del gobierno socialista anterior, el IMSERSO retire a Extremadura 12 millones de euros destinados a las personas dependientes, esas que más necesitan estas ayudas".
En su opinión, la consecuencia más inmediata de esta pérdida de fondos es que no se pueden conceder nuevas ayudas incluidas en la Ley de Dependencia, crear nuevas plazas residenciales en los centros de mayores, establecer plazas de teleasistencia o aumentar el número de plazas en las residencias municipales para mayores con un incremento de su financiación.
En definitiva, ha apuntado, "se deja sin cobertura pública una serie de servicios esenciales en el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia".