El secretario de la Federación de Empleados Públicos de la USO, Enrique Jiménez, ha señalado durante una concentración de la Marea Blanca por la muerte de Rocío Cortés, que la gerencia del hospital estaba informada de los fallos en los ascensores, ya que llevan años presentando denuncias verbales y escritas, y desde finales de 2015, también ante la Inspección de Trabajo.
En las denuncias "se ponía en evidencia el peligro para los trabajadores y para los usuarios" al subrayar una serie de fallos en los ascensores, desde puertas que se cerraban antes de tiempo hasta paradas "con escalones" en las plantas, ha explicado Jiménez.
Asimismo, el delegado sindical de USO y sindicato de celadores en Valme, Victorio Carcela, ha informado a los medios de que en la reunión de la Junta de Personal con la Dirección del Hospital el pasado 21 de agosto se ha solicitado que se vuelvan a abrir las segundas puertas en los ascensores de las plantas primera y segunda para el traslado de pacientes a la UCI y quirófano, “que se clausuraron hace años".
DECLARACIONES "TEMERARIAS"
Por su parte, la dirección del Hospital de Valme ha negado reiteradamente tener constancia de incidentes previos con el ascensor donde se produjo el trágico accidente. De hecho, desde la dirección del centro hospitalario consideran “cuanto menostemerarias” las declaraciones realizadas por los portavoces de la Marea Blanca.
A su vez, el centro hospitalario sevillano ha aclarado en un comunicado que las denuncias de USO sobre deficiencias en el ascensor en el que murió una joven el pasado domingo "tienen fecha anterior a la finalización de las obras de mejora realizadas entre agosto y octubre de 2016".
Además, el texto añade que, tras estas mejoras, "se constituyó un grupo de participación de profesionales para aportar sus conocimientos y experiencia, contribuyendo a mejorar los circuitos y flujos en los traslados verticales de pacientes".
Respecto a "las dos posibles denuncias a la Inspección de Trabajo" realizadas por USO, el Hospital de Valme supone que "quedarían archivadas como reconoce la propia organización sindical puesto que no tenemos constancia de ellas".
Este centro hospitalario recuerda que está obligado a suscribir un contrato de mantenimiento con una empresa conservadora de ascensores autorizada y a realizar una revisión cada dos años por un organismo de control autorizado (OCA), "tal y como así se hizo en el ascensor accidentado, la última vez en mayo de 2017, siendo el resultado de ésta favorable y sin defectos".
En las denuncias "se ponía en evidencia el peligro para los trabajadores y para los usuarios" al subrayar una serie de fallos en los ascensores, desde puertas que se cerraban antes de tiempo hasta paradas "con escalones" en las plantas, ha explicado Jiménez.
Se ha solicitado que se vuelvan a abrir las segundas puertas en los ascensores de las plantas primera y segunda para el traslado de pacientes a la UCI y quirófano
Por este motivo, desde el sindicato piden la dimisión de la actual directora general de Asistencia Sanitaria de la Junta de Andalucía y de la exdirectora del hospital de Valme, María Dolores Alguacil, a la que han acusado de haber hechos "oídos sordos" a las denuncias presentadas por el sindicato. En palabras de Jiménez, la dirección recibió hasta cinco denuncias por escrito sobre estas incidencias.Asimismo, el delegado sindical de USO y sindicato de celadores en Valme, Victorio Carcela, ha informado a los medios de que en la reunión de la Junta de Personal con la Dirección del Hospital el pasado 21 de agosto se ha solicitado que se vuelvan a abrir las segundas puertas en los ascensores de las plantas primera y segunda para el traslado de pacientes a la UCI y quirófano, “que se clausuraron hace años".
DECLARACIONES "TEMERARIAS"
Por su parte, la dirección del Hospital de Valme ha negado reiteradamente tener constancia de incidentes previos con el ascensor donde se produjo el trágico accidente. De hecho, desde la dirección del centro hospitalario consideran “cuanto menostemerarias” las declaraciones realizadas por los portavoces de la Marea Blanca.
A su vez, el centro hospitalario sevillano ha aclarado en un comunicado que las denuncias de USO sobre deficiencias en el ascensor en el que murió una joven el pasado domingo "tienen fecha anterior a la finalización de las obras de mejora realizadas entre agosto y octubre de 2016".
La mejora de los tres ascensores centrales supusieron una inversión de 58.873 euros e incluyeron modernización interior, mandos y señalizaciones, sistemas de detección de presencias, de precisión en la nivelación de paradas y de control de tráfico
Según explica el hospital, estas actuaciones de mejora en los tres ascensores centrales supusieron una inversión de 58.873 euros e incluyeron modernización interior, mandos y señalizaciones, sistemas de detección de presencias, sistemas de precisión en la nivelación de paradas y sistema de control de tráfico de ascensores."Tras esas actuaciones realizadas, no constan escritos de denuncia de USO sobre el funcionamiento de los ascensores", sostiene en el comunicado la dirección del hospital.Además, el texto añade que, tras estas mejoras, "se constituyó un grupo de participación de profesionales para aportar sus conocimientos y experiencia, contribuyendo a mejorar los circuitos y flujos en los traslados verticales de pacientes".
Respecto a "las dos posibles denuncias a la Inspección de Trabajo" realizadas por USO, el Hospital de Valme supone que "quedarían archivadas como reconoce la propia organización sindical puesto que no tenemos constancia de ellas".
Este centro hospitalario recuerda que está obligado a suscribir un contrato de mantenimiento con una empresa conservadora de ascensores autorizada y a realizar una revisión cada dos años por un organismo de control autorizado (OCA), "tal y como así se hizo en el ascensor accidentado, la última vez en mayo de 2017, siendo el resultado de ésta favorable y sin defectos".