Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla viven pendientes de poder reforzar sus servicios sanitarios con más facultativos. No en vano, se trata de los territorios españoles con una menor ratio de médicos por habitante. Unas deficiencias de plantilla que afectan especialmente al ámbito del primer nivel asistencial. Los propios datos del último Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2023, facilitado por el Ministerio de Sanidad, cifran la presencia de médicos en Atención Primaria para Ceuta y Melilla en 0,57 facultativos por cada 1.000 habitantes.
En este contexto de necesidades, se ha conocido el número de plazas MIR de las que dispondrán ambas localidades de cara a la convocatoria 2024-2025. En concreto, serán nueve vacantes médicas para Ceuta y otras cinco para Melilla. A estas, se han añadido seis puestos formativos de enfermería en Ceuta y cuatro en Melilla. Todos los candidatos a las mismas podrán formalizar su solicitud –como en el resto del país- entre el 2 de septiembre y el día 16 del mismo mes.
En Ceuta estarán a disposición de los solicitantes cinco plazas de médico de familia, dos de Medicina del Trabajo, una de Medicina Interna y otras de Medicina Preventiva y Salud Pública
Por todo ello, no es casualidad que la mayoría de las plazas para residentes en Ceuta se hayan destinado a Medicina de Familia y Comunitaria. En el cómputo global, los nueve puestos asignados suponen dos plazas más de las recogidas en la convocatoria anterior, cuando fueron apenas siete. De esta manera, de cara al próximo año, estarán a disposición de los solicitantes cinco plazas de médico de familia, dos de Medicina del Trabajo, una de Medicina Interna y otras de Medicina Preventiva y Salud Pública.
Aparte de todo esto, la oferta de Formación Sanitaria Especializada (FSE) en la localidad ceutí se completa con otras seis plazas destinadas al ámbito de la enfermería: dos para Enfermería del Trabajo y cuatro para Enfermería Obstetrico-ginecológica. Disciplinas que, al igual que la médica, se encuentran carentes de personal suficiente, según viene denunciando el propio colectivo enfermero local.
En Melilla el reparto de la convocatoria MIR de cara al próximo curso se ha saldado con un total de cinco plazas para nuevos médicos en formación. Todas ellas en el ámbito de la Medicina de Familia y Comunitaria
Por su parte, en la vecina Melilla el reparto de la convocatoria MIR de cara al próximo curso se ha saldado con un total de cinco plazas para nuevos médicos en formación. Todas ellas en el ámbito de la Medicina de Familia y Comunitaria. Asimismo, la dotación de puestos FSE para la ciudad ubicada en el norte de África se completa con otras cuatro plazas acreditadas en Enfermería Obstetrico-ginecológica.
INCENTIVO FRENTE A LAS VACANTES
En los últimos años, viene siendo tradición que muchas plazas MIR en España queden finalmente sin ocupante. Alrededor de 500 el pasado año. Una realidad que afecta principalmente a la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria, eminentemente en los centros de Atención Primaria más aislados y rurales del país. Sin ir más lejos, el pasado año Ceuta dejó dos de estas vacantes sin cubrir en la primera convocatoria. Algo que finalmente logró enmendar en el posterior proceso extraordinario de elección de plazas.
INGESA otorga un complemento por residencia de alrededor de 1.000 euros al mes para contrarrestar el aislamiento y las dificultades de cobertura en las localidades norteafricanas
Un elemento importante para atraer a los candidatos MIR hasta las ciudades autónomas y lograr que se queden tras su periodo de residencia pasa por el hecho de generar incentivos. En esta línea, el Instituto para la Gestión Sanitaria (INGESA) –organismo dependiente del Ministerio de Sanidad que dirige la sanidad de Ceuta y Melilla- otorga un complemento por residencia de alrededor de 1.000 euros al mes para contrarrestar el aislamiento y las dificultades de cobertura en las localidades norteafricanas.
De esta manera, según una aproximación llevada a cabo por el Sindicato Médico de Granada, los médicos residentes en Ceuta y Melilla son quienes más cobran de todo el país. Teniendo en cuenta el mencionado complemento, los residentes de primer año perciben un salario mensual de 2.005 euros (25.542 euros anuales); los de segundo año perciben 2.088 euros netos (26.662 euros anuales); los de tercer año, 1.194 euros (28.069 euros anuales); los de cuarto año, 2.298 euros (29.471 euros anuales); y los de quinto año, 2.404 euros netos (30.877 euros anuales).