En las elecciones sindicales del Instituto Catalán de la Salud (ICS), que tuvieron lugar este miércoles, el Sindicato de Enfermería (Satse) ha obtenido un "gran resultado", ya que es la única formación sindical de la Mesa Sectorial de Sanidad que ha aumentado en número de votos y delegados. Con un total de 61 delegados, el sindicato se consolida en Cataluña como una formación representativa y decisiva en la sanidad pública de la autonomía.
"Con su confianza, los profesionales han validado el trabajo que hemos hecho en los últimos años", han asegurado fuentes de Satse. Así, la organización interpreta este aumento de representatividad como "una responsabilidad hacia la Enfermería, la Fisioterapia y todos los que conformamos la sanidad pública". En este contexto, el sindicato ha querido expresar su agradecimiento a los votantes y ha destacado que su apoyo supone "un nuevo impulso para continuar defendiendo, con más ahínco si cabe, a la profesión".
"Tendremos a partir de ahora más fuerza para reclamar en todas las mesas y órganos de negociación la mejora de las condiciones laborales y profesionales de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas"
"DE AHORA EN ADELANTE, CON MÁS FUERZA"
"Ha llegado el momento de que la profesión avance de nuevo y, gracias al apoyo que los profesionales nos han dado con su voto, tendremos a partir de ahora más fuerza para reclamar en todas las mesas y órganos de negociación la mejora de las condiciones laborales y profesionales de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas. De esta forma, los ciudadanos recibirán una atención sanitaria de mayor calidad", señalan desde Satse.
El aumento de las plantillas de Enfermería y Fisioterapia hasta conseguir unas ratios adecuadas constituye la principal prioridad de Satse y, por ello, reforzará su acción sindical a partir de los próximos meses para conseguir que el Instituto Catalán de la Salud termine, "de una vez por todas", con la actual situación.
Asimismo, el sindicato pondrá "todo su empeño" para conseguir la recuperación de todos los derechos laborales perdidos en los años de crisis, entre ellos, y especialmente, la jornada semanal de 35 horas. Además, tiene como objetivos el reconocimiento del solapamiento de jornada como tiempo efectivo de trabajo, la creación de un itinerario laboral que permita la mejora progresiva de las condiciones de trabajo, la carrera profesional de los interinos, la estabilidad en la contratación, el acceso voluntario a la jubilación parcial y anticipada sin pérdida económica, la clasificación profesional de enfermeras y fisioterapeutas en el grupo a sin distinciones y lograr el desarrollo e implantación efectiva de las especialidades de Enfermería.