El Hospital Universitario Germans Trias se ha convertido en el primer hospital en España en llevar a cabo las primeras mastectomías desarrolladas mediante una plataforma robótica. En concreto, el hito se ha logrado al operar a dos mujeres que ya se recuperan satisfactoriamente en casa tras ser sometidas a este procedimiento quirúrgico y a una inmediata reconstrucción de las mamas.
La primera paciente operada, una mujer de 45 años, presentaba una lesión de gran tamaño en la mama izquierda precursora de cáncer de mama y múltiples lesiones de riesgo en ambas mamas. Por ello, el Comité Multidisciplinar de Cáncer de Mama de la Unidad Funcional del hospital, junto con la propia paciente, optaron por la mastectomía como medida preventiva, seguida de una reconstrucción de ambas mamas.
"Ha sido una decisión muy acertada, visto cómo fue la operación, el estado del tejido extirpado y cómo me estoy recuperando", explica la paciente, que ahora nota más sensibilidad de la esperada en la mama y que en pocos días dejó de tomar medicación postoperatoria. "Ojalá mi caso ayude a otras mujeres a optar por este procedimiento", concluye.
"Ha sido una decisión muy acertada, visto cómo fue la operación, el estado del tejido extirpado y cómo me estoy recuperando"
En el caso de la segunda paciente intervenida, de 55 años, ya presentaba una neoplasia en la mama derecha, que fue extirpada y reconstruida con prótesis. Estos tipos de intervenciones tradicionalmente se realizan con cirugía abierta convencional, pero en los últimos años se ha evolucionado hacia la vía endoscópica (con pequeños orificios en la piel que permiten la entrada de una cámara y material quirúrgico para llevar a cabo el procedimiento).
Ahora, Lidia Blay, que ha llevado a cabo el procedimiento junto a Icíar Pascual, ambas cirujanas del equipo que coordina Joan Francesc Julián, jefe de Servicio de Cirugía General, y con la implicación de los profesionales de la Unidad de Patología Mamaria del centro hospitalario y el equipo del bloque quirúrgico, han dado un paso más realizando de forma pionera en el Estado español esta intervención vía robótica.
Los resultados que se habían obtenido hasta ahora, sin tener que recurrir a la cirugía robótica de mama, ya representaban una mejora respecto a la cirugía abierta, pero ahora se ha querido dar un paso más allá y apostar por esta nueva técnica porque todavía puede ofrecer mayores beneficios para las pacientes.
En este sentido, a diferencia de la cirugía abierta, operar con la plataforma robótica permite realizar heridas más pequeñas, lesionando menos la piel, mejorar la estética -en tanto que la cicatriz se limita a una mínima incisión en la axila- y operar con mejor precisión gracias a instrumentos que realizan múltiples movimientos, y una imagen más ampliada y en 3D. Además, con este nuevo sistema, el profesional trabaja acoplado en una consola que mejora la ergonomía del cirujano durante las horas que duran las intervenciones.
Aún en fase de estudio, todo ello redunda en la recuperación de las pacientes, que en el caso de las mastectomías puede suponer una mayor preservación de la sensibilidad en la areola y en el pezón, gracias a una menor manipulación y daño en los nervios de la mama.
Además, determinados estudios todavía en marcha adelantarían que las cirugías mínimamente invasivas en el cáncer de mama para estas operaciones reducirían las complicaciones postoperatorias y podrían contribuir a disminuir las células cancerígenas libres en sangre.
No hace falta perder de vista que esta nueva forma de hacer no está orientada a mejorar los resultados oncológico sino para mejorar la calidad de vida de las personas
De hecho, se estima que en el futuro, al igual que ha ocurrido con otras patologías, es probable que las linfadenectomías (extraer todos los ganglios axilares) y algunas mastectomías se realicen mediante cirugía mínimamente invasiva en todos los hospitales. Para Blay, “si puedes ofrecer linfadenectomías o mastectomías haciendo incisiones mínimas, si puedes realizar un vaciamiento axilar preservando la sensibilidad con idéntico resultado oncológico y con menos complicaciones post quirúrgicas, el progreso es evidente y el camino está marcado”.
Sin embargo, no hace falta perder de vista que esta nueva forma de hacer no está orientada a mejorar los resultados oncológicos -que ya son lo suficientemente positivos- sino para mejorar la calidad de vida de las personas, específicamente de las mujeres con cáncer de mama.