Desde el pasado 9 de diciembre, con la implementación de un nuevo protocolo, las enfermeras y enfermeros de Cataluña pueden indicar y autorizar diferentes tratamientos farmacológicos para dejar de fumar. Hasta final de enero, 2.355 profesionales ya han hecho al menos una indicación con la guía del tabaco a un total de 7.637 pacientes. Este protocolo refuerza el papel clave de las enfermeras en la atención primaria y comunitaria.
Esta nueva competencia mejora el acceso a la medicación para la ciudadanía, refuerza la autonomía de las enfermeras y enfermeros de Cataluña en el contexto de los programas de cese, en los que ya desempeñan un papel clave como agentes de salud, e incrementa la eficiencia del sistema.
El protocolo no sólo autoriza la prescripción, sino que formaliza y potencia la labor que las enfermeras ya desarrollaban en el acompañamiento de las personas que desean dejar de fumar. Este enfoque integral incluye además intervenciones educativas y de soporte conductual, monitorización del tratamiento y resultados en salud, seguimiento personalizado para mejorar la adherencia terapéutica, prevención y detección de efectos adversos.
Este enfoque pone en valor el liderazgo de las enfermeras en la atención directa a la persona, especialmente en el ámbito de la salud comunitaria, reforzando su autonomía y capacidad para mejorar los resultados de salud poblacional.
Ofrecer ayuda desde los servicios sanitarios para dejar de fumar es uno de los ejes de las políticas de control del tabaco que impulsa Salud Pública
Este protocolo ha sido diseñado con el objetivo de sistematizar y adaptar la Guía para la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica por parte de las/los enfermeras/os , publicada en el BOE, al contexto catalán. El documento permite la prescripción enfermera de tratamientos farmacológicos específicos para el cese tabáquico, como la vareniclina y la citisiniclina.
El protocolo ha sido elaborado y aprobado por el Programa de Armonización farmacoterapéutica del Servicio Catalán de la Salud, en coordinación con la Agencia Salud Pública de Cataluña y las redes de Atención Primaria y de Hospitales sin Humo, así como con la participación activa de la Gerencia de Cuidados Enfermeros del Servicio Catalán de la Salud y diversas Entidades sanitarias de la , el Consejo de Colegios de Enfermeras y Enfermeros de Cataluña, e instituciones como el Consorcio de Oncología y Badalona Servicios Asistenciales (BSA), entre otros.
Tiene un impacto directo en la prevención y control del tabaquismo, un problema de salud pública que causa anualmente casi 10.000 defunciones por enfermedades causadas por el consumo y la exposición al humo del tabaco. Ofrecer ayuda desde los servicios sanitarios para abandonar el tabaco es una de las estrategias efectivas para abordar el tabaquismo que impulsa la Secretaría de Salud Pública del Departamento de Salud, y que se materializa principalmente a través del Programa de Atención Primaria sin Humo y la Red Catalana de Hospitales sin Humo.
COMPROMISO CON EL COLECTIVO ENFERMERO
Esta iniciativa se enmarca dentro de la estrategia del Govern para reconocer, potenciar y fortalecer el papel esencial del colectivo enfermero en el sistema sanitario catalán. La prescripción enfermera, regulada por el Real Decreto 954/2015 y ampliada por el Real Decreto 1302/2018, es una herramienta clave para garantizar una atención más accesible, resolutiva y cercana a las necesidades de la ciudadanía.
Con la implementación de este protocolo, Cataluña da un nuevo paso para situarse a la vanguardia en el impulso de la prescripción enfermera, consolidando su compromiso con la innovación sanitaria y la mejora continua de la calidad asistencial.