Las últimas declaraciones de Quim Torra, presidente de la Generalitat de Cataluña, sobre “atacar a este Estado Español injusto” y la reacción de la oposición pidiendo de nuevo la aplicación del artículo 155 de la Constitución están contribuyendo a la polarización de la sociedad catalana. Pero, ¿cómo afecta la situación política a la profesión? Ignacio García Forcada, presidente del Sindicato Médico de Cataluña (Simecat), explica a ConSalud.es que aunque “el sindicato se ciñe al tema laboral”, están preocupados porque han detectado un conflicto civil que repercute en la salud de las personas y, en cierta medida, a los sanitarios.
“El problema político que ahora mismo hay en Cataluña, la hacen un destino laboral muy poco atractivo para los médicos, mi impresión es que es difícil que profesionales de otras partes de España vengan aquí”, destaca Forcada. En este punto, el presidente de Simecat recuerda que los MIR abandonan sus centros de formación después de terminar la residencia, sobre todo para trabajar en el extranjero, lo que dificultad garantizar la tasa de reposición.
Por otra parte, Forcada subraya que la atención que acapara el conflicto político en Cataluña roba la atención a otros asuntos sin resolver, como pueden ser los problemas laborales. “No hay manera de poder llegar a ningún tipo de acuerdo porque está todo paralizado y el resto de problemas quedan en un segundo plano", advierte.
“Cataluña urgentemente necesita una reconciliación porque la situación que vivimos no es positiva para nadie”
En concreto, el portavoz sindical recuerda que en Cataluña, al igual que en el resto de España, la profesión médica se encuentra con “una situación laboral muy precaria porque en comparación con nuestros homólogos europeos estamos mal pagados, basta con compararse con Grecia o Portugal, donde los salarios son superiores”.
Esa precariedad que denuncia el sindicato se ve agravada, según Forcada, a que durante los años de la crisis las Comunidades Autónomas han llevado a cabo ERES (Expedientes de Regulación de Empleo) de forma encubierta. “En Cataluña a día de hoy las plantillas de los hospitales públicos son menores en número que hace diez años”, apunta.
Con respecto a la tasa de reposición, Forcada insiste en que las condiciones laborales favorecen que los MIR se marchen fuera, lo que empeora la situación dado el envejecimiento de las plantillas. “Antes de la crisis cuando se jubilaba un facultativo, había uno de repuesto, pero ahora el puesto o bien se amortiza o no se encuentra gente joven a quien contratar”, comenta Forcada y concluye: “Cataluña urgentemente necesita una reconciliación porque la situación que vivimos no es positiva para nadie”.