La España vaciada es uno de los principales problemas a los que está teniendo que hacer frente el país en los últimos años. No todas las zonas del país lo están sufriendo de la misma manera, una de las comunidades autónomas más castigadas es sin lugar a dudas Castilla y León.
Los representantes autonómicos son muy conscientes de esto y desde hace meses luchan por llevar a cabo medidas que le pongan freno al éxodo rural. Muchas de ellas están relacionadas con darle una segunda vida a la medicina rural.
Es necesario que no se cierren los consultorios médicos a la par que se prestan unos servicios de calidad en el mundo rural
Por ejemplo, a mediados del año se aprobó una batería de mejoras para los profesionales sanitarios que permanezcan en puestos de difícil cobertura. Esta iniciativa pretende reconocer la labor de los profesionales que elijan trabajar en zonas rurales o remotas y garantizar la presencia y estabilización de profesionales en estos puestos.
El éxodo de los médicos va de la mano con el cierre de consultorios. Sobre esto se ha pronunciado esta semana Luis Tudanca, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en las Cortes de Castilla y León, después de reunirse con representantes de la Federación de Empleos Públicos, en la sección de sanidad de UGT Castilla y León.
En palabras de Tudanca, el PSOE se opone frontalmente al cierre de consultorios médicos en el medio rural, asegurando que el partido que él representa está comprometido con el apoyo a la sanidad rural.
Para el portavoz del PSOE para salvar la sanidad es necesario que no se cierren los consultorios médicos a la par que se prestan unos servicios de calidad en el mundo rural que luchen contra la despoblación.
El representante socialista también ha querido mostrar su compromiso con los profesionales sanitarios en la necesidad de que cuenten con una carrera profesional adecuada, ya que muchos de ellos son interinos y cuentan con unos contratos precarios.
La sanidad rural también es una prioridad para la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que durante su intervención en su primera comisión de Sanidad dedicó una parte a este tema.
Para mejor esta situación, Casado propuso dos medidas concretas. Por un lado, desarrollar la tecnología necesaria para poder implantar consulta telefónica y por otro, fomentar que los jóvenes médicos tengan la posibilidad de desarrollar la residencia en el medio rural “porque no se ama lo que no se conoce”.