Un total de 639 profesionales sanitarios fueron agredidos en 532 incidentes registrados en Castilla y León el año pasado. En los centros hospitalarios, 367 trabajadores sufrieron algún tipo de agresión, mientras que en Atención Primaria fueron 265 y otros siete en el ámbito de Emergencias Sanitarias. Además, la comunidad registró el año pasado un total de 56 denuncias presentadas por vía penal. En cuatro de ellas ya ha recaído sentencia condenatoria por diversos tipos de delito.
Éstos son algunos de los datos del registro de agresiones de la Gerencia Regional de Salud del año 2017 que han sido analizados en el Pleno de la sección de agresiones al personal de centros sanitarios del Observatorio de la Comunidad de Castilla y León, el cual ha sido presidido por el gerente regional de Salud, Rafael López.
Cuatro de las 56 denuncias fueron sentencias condenatorias
De los incidentes registrados, la Consejería de Sanidad de la comunidad ha destacado que el 63 % de las agresiones fueron de carácter verbal, mientras que el 20 % fueron psicológicas y el 17 % fueron agresiones físicas; de estas últimas, el 63 % se produjo en las áreas de Psiquiatría.
Del total de trabajadores agredidos, 231 fueron médicos, 203 profesionales de Enfermería, 109 técnicos en cuidados auxiliares de Enfermería, 23 celadores, 47 administrativos y 26 correspondientes a otras categorías. En cuanto a distinción por género, cabe destacar que 85 de los trabajadores agredidos fueron hombres y 554 mujeres, lo que supone que el 1 % de los hombres de la plantilla de Sacyl sufrieron algún tipo de agresión y el 2 % en el caso de las mujeres.
Con respecto a las sentencias condenatorias, desde 2005 se han dictado 192 por agresiones, de las cuales 44 fueron por delito de atentado y 20 por otro tipo de delito (el resto fueron consideradas como faltas). Además, en 2018 se ha solicitado la incoación de 51 expedientes sancionadores.