Fin al culebrón. Tras años de lucha y de declaraciones cruzadas entre las universidades de Burgos y de León por un lado y de la Junta de Castilla y León por otro, hoy era el día clave: Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta, se ha reunido este miércoles 2 de octubre tanto con sus rectores (Manuel Pérez Mateos y Nuria González) como con los de las otras dos universidades públicas de la comunidad autónoma, Valladolid (Antonio Largo) y Salamanca (Juan Manuel Corchado), y, a su término, la consejera de Educación, Rocío Lucas, ha hecho oficial la buena nueva: la UB y la ULE ofertarán, dentro de dos años, el grado en Medicina.
Lucas, según recoge el Diario de Castilla y León, ha informado tras la reunión que todo parte del “consenso” mostrado por las cuatro instituciones y por el Gobierno autonómico. Esto fue, asegura la consejera de Educación, lo que propició que desde la Junta se decidiese porque León y Burgos inicien los trámites para implementar el grado en Medicina, algo que pasa por “trabajar ya en los planes de estudio”, y que Valladolid y Salamanca también incorporen a su oferta, como contraposición, los grados en Farmacia y Veterinaria, respectivamente.
“En principio, no es necesario construir nuevas facultades"
Lucas, que también estuvo presente en la reunión mantenida entre Mañueco y los rectores, ha detallado que en la Universidad de León se barajan entre 70 y 100 plazas, mientras que la previsión para la de Burgos es de entre 40 y 70. No obstante, matiza la consejera, estas cifras se concretarán según se vayan perfilando los detalles necesarios para poner en marcha ambas titulaciones. “En principio, no es necesario construir nuevas facultades. Se irá viendo si se requiere adaptación de lo ya existente”, indica la consejera de Educación de Castilla y León.
La intención de la Junta es que todo esté listo para el curso 2026/2027, ya que para el próximo 2025/2026, reconocen, sería imposible. Así, de cara a esta fecha, Lucas señala que, a partir de este momento, las universidades de León y de Burgos trabajarán de la mano con la Consejería para que los planes de estudio que propongan cuenten con la viabilidad técnica necesaria. Las facultades de Medicina de Valladolid y Salamanca, por su parte, “apoyarán” a sus ahora homónimas de la comunidad autónoma en diversos aspectos, principalmente el del profesorado.
UN PROYECTO VIABLE
Y es que este es, seguramente, el principal escollo que tienen por delante ambas instituciones, y que afecta a prácticamente todas las facultades de Medicina que hay en nuestro país. Tanto, que el decano de la Universidad de Valladolid, José María Fernández, se mostraba recientemente “incrédulo” de abrir más facultades en Castilla y León. “No se entiende de dónde van a sacar profesores de calidad”, se preguntaba el decano de la UV, una de las instituciones que, a pesar de contar con 620 años de historia, estaba encontrando serias dificultades para mantenerlo.
La rectora de la Universidad de León, por su parte, aseguraba durante un desayuno de apertura del curso académico a principios de este mes de septiembre que la memoria que tenía preparada su universidad, y que iban a presentar durante su reunión con Mañueco, era acorde a las exigencias que se hacen desde la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León (ACSUCyL). El principal requisito que no cumple León, reconocía entonces González, es el de la financiación, algo que, no obstante, recordaba la rectora, “le corresponde asegurar a la Junta”.
“Queremos demostrar a la Junta de Castilla y León que hace falta una cantidad de dinero, sí, pero no tan alta como se pueden pensar”
“Queremos demostrar a la Junta de Castilla y León que hace falta una cantidad de dinero, sí, pero no tan alta como se pueden pensar”, explicaba también su predecesor en el cargo, Juan Francisco García Martín, en una entrevista concedida a ConSalud.es en el mes de mayo: “Ya hay edificios del campus de Ciencias de la Salud preparados para los primeros cursos, y mientras tanto se podría o bien hacer una nueva construcción en el propio campus, que sería la más costosa, o bien adecuar un antiguo hospital que está al lado mismo del complejo hospitalario”. Según las últimas declaraciones de Rocío Lucas, no sería necesario construir nada.
Precisamente, Lucas agradeció a Mañueco su intención de reunirse con Pedro Sánchez para demandar financiación para Castilla y León, el “gran caballo de batalla” para que las universidades puedan sacar adelante sus proyectos. Otros temas que se abordaron durante la reunión, informa el Diario de León, fueron la nueva ley de Universidades -la citada LOSU- o el también consenso para recuperar el plan de infraestructuras. “Llevamos dos años sin él, y es preciso acometer proyectos nuevos y mantener los ya existentes”, recordó la consejera.