La Dirección de Enfermería del Complejo Hospitalario Universitario de Toledo ha incorporado la Consulta de Enfermería de Micropigmentación para pacientes con cáncer de mama. Esta técnica está destinada a aquellas mujeres que se hayan sometido a una intervención quirúrgica y hayan visto modificada su imagen corporal.
El centro realiza cerca de 300 mastectomías al año y, de todas ellas, cerca de un 30% de las pacientes podrán beneficiarse de esta prestación, con la que se completaría todo el proceso de reconstrucción mamaria. Por ahora, este procedimiento se ha realizado a un total de once pigmentaciones en siete mujeres.
Las pacientes, tras haber pasado por una cirugía mamaria oncoplástica con extirpación total o parcial del complejo areola-pezón de la mama afectada, podrán someterse a este proceso de pigmentación. Se trata del último paso después de la reconstrucción y recuperación de la paciente.
Gracias a esta técnica, las pacientes que se han sometido a una mastectomía pueden recuperar la zona del pezón y la areola mamaria, y mejorar su calidad de vida y autoestima
Las enfermeras responsables de la consulta, Beatriz Arroyo García y Maria Luisa Gómez Morales, explican que, gracias a esta técnica, las pacientes que se han sometido a una mastectomía pueden recuperar la zona del pezón y la areola mamaria, y de esta manera mejoran su calidad de vida y su autoestima, recuperando el aspecto previo a la intervención.
Estas profesionales han recibido la formación especializada necesaria y, además, tienen una amplia experiencia en los cuidados de la mujer mastectomizada para poder desarrollar este procedimiento.
La micropigmentación de la areola mamaria implica la inserción de pigmentos inorgánicos, certificados y aprobados por la Agencia Estatal del Medicamento, en la capa superficial de la piel de la paciente. El objetivo es recrear la forma, color y disposición de la areola original. Se busca lograr la mayor simetría posible con la otra mama en casos donde solo una ha sido afectada, mientras que en casos de afectación bilateral, se acuerda con la paciente la forma y tamaño deseados.
Las pacientes deben haber completado el tratamiento de quimioterapia y deben haber pasado más de seis meses desde la cirugía con prótesis definitiva y la radioterapia
Para someterse a este procedimiento, las pacientes deben haber completado el tratamiento de quimioterapia y deben haber pasado más de seis meses desde la cirugía con prótesis definitiva y la radioterapia. Además, la piel de la zona debe estar libre de lesiones dermatológicas.
La consulta se encuentra en la primera planta del Edificio G del Hospital Universitario de Toledo. Las pacientes que cumplen los criterios de inclusión son referidas por los médicos de la Unidad de Patología Mamaria o del servicio de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. Este procedimiento suele llevarse a cabo en tres visitas.
En la primera visita, se realiza una prueba cutánea de alergia a los pigmentos y un estudio de la zona corporal, además de explicar todo el proceso a la paciente. En la segunda visita, que tiene lugar 72 horas después, se realiza la micropigmentación bajo anestesia local y con una duración aproximada de una hora y media. Un mes después de la técnica, se realizan los retoques necesarios y se proporcionan las indicaciones de cuidado.