El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reducido las listas de espera notablemente en los últimos seis años. Tanto es así que, a cierre del año 2021, las listas de espera sanitarias se situaron en los 84.169 pacientes, lo cual se traduce en un 53% menos que al cierre de 2015 y 60.000 pacientes menos que en 2013. Las cifras corresponden a los datos publicados hoy en el Portal de Transparencia y Salud de la Consejería de Sanidad castellanomanchega, dirigida por Jesús Fernández Sanz.
Tal y como recoge el Gobierno de Castilla-La Mancha en nota de prensa, al final de 2021, había 60.000 pacientes menos que en 2013 que estuviesen pendientes de una intervención quirúrgica, una primera consulta con el especialista o a la espera de realización de una técnica diagnóstica. "Habría que remontarse al año 2009 para encontrar unos datos de lista de espera mejores que los que se han conseguido al finalizar el ejercicio anterior", explica la Consejería.
Los datos de cierre del pasado 2021 muestran "los buenos resultados que está arrojando el proyecto estratégico puesto en marcha por el Gobierno regional a principios de este año" para disminuir tanto la lista de espera en su conjunto como los tiempos de espera en el acceso a una cirugía.
En el último año, el tiempo medio de espera para ser operado se ha reducido en 173 días
De los pacientes en lista de espera al finalizar el pasado año, 30.956 corresponden a lista de espera quirúrigica, lo cual se traduce en 8.000 pacientes menos de los que había al cierre de 2020 y un 23% menos que al finalizar 2015.
En el último año, el tiempo medio de espera para ser operado se ha reducido en 173 días (casi seis meses), de forma que se ha pasado de los 286 días al cierre de 2020, a los 113 días en los que se ha situado al finalizar el año anterior.
Por otra parte, la lista de espera para consulta con el especialista se situó al cierre del mes de diciembre en 47.095 pacientes, casi un 36% menos que hace seis años. Asimismo, la lista de espera para acceder a una técnica diagnóstica fue de 6.118 pacientes, lo que supone un 60% menos que en 2015 y cuatro veces menos de los que había esperando en el año 2012, cuando casi llegaron a los 25.000.