El Hospital Universitario Marqués de Valdecilla ha puesto en marcha de forma pionera en España un programa de neurocirugía oncológica ambulatoria con el que pretende mejorar la calidad de la asistencia que presta al paciente y contribuir a una mejor recuperación, disfrutando de las comodidades de su domicilio y la compañía de su familia el mismo día en el que se le extirpa el tumor.
El consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha puesto en valor los beneficios y la calidad de este programa, asegurando que representa un ejemplo de lo que tiene que ser la asistencia sanitaria actual, caracterizada en una atención interdisciplinar y basada en la coordinación entre servicios. Acompañado por el director gerente de Valdecilla, Rafael Tejido, el titular de sanidad ha mantenido un encuentro con los profesionales implicados en este programa para conocer su desarrollo y aplicación.
Liderado por el Servicio de Neurocirugía, gracias a la cooperación y las innovaciones introducidas en los servicios de Hospitalización Domiciliaria y Anestesiología y Reanimación, este programa permite aplicar a los pacientes con tumores cerebrales un procedimiento igual de eficaz y seguro que cuando permanecen ingresados en el hospital.
"Ha implicado mucho trabajo de un equipo muy grande de profesionales, aunque probablemente lo más difícil para todo el equipo y la población en general sea el cambio de paradigma"
Aunque se espera que las indicaciones para este procedimiento ambulatorio vayan creciendo, por el momento sólo pueden beneficiarse voluntariamente los pacientes que cumplan con criterios muy estrictos en cuanto al tipo de tumor que padecen (muy bien localizado y en una zona accesible) y su estado de salud general, es decir, que no tengan patologías asociadas importantes, ni respiratoria, ni cardiaca, ni sistémica, que recomienden un ingreso hospitalario.
El responsable del programa, el doctor Carlos Velásquez, que se ha formado en el Toronto Western Hospital de la Universidad de Toronto, pionero a nivel mundial en este tipo de procedimientos, gracias a una beca del Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (Idival), ha explicado que ponerlo en marcha en Valdecilla "ha implicado mucho trabajo de un equipo muy grande de profesionales, aunque probablemente lo más difícil para todo el equipo y la población en general sea el cambio de paradigma, el cambio de mentalidad de que después de una cirugía de un tumor cerebral el paciente se puede ir a casa".
En este sentido, ha subrayado la idea de que el procedimiento se aplica a pacientes "muy bien seleccionados" y una vez que en el posoperatorio se comprueba, de nuevo, que "cumplen con todos los requisitos para poder marcharse a casa". Así, después de la selección del paciente teniendo en cuenta multitud de parámetros, el día de la intervención se lleva a cabo un procedimiento anestésico y quirúrgico mucho menos invasivo de lo habitual.
Esta forma de proceder es factible gracias a la amplia experiencia en Neurocirugía oncológica y también a la dotación de medios técnicos de Valdecilla: el neuronavegador, la tractografía, la ecografía intraoperatoria o el monitor hemodinámico, que facilitan que el paciente pueda disfrutar de unas condiciones de recuperación mejores a pesar de haberse sometido a una cirugía tan delicada.
La cartera de servicios que prestan los profesionales de Hospitalización Domiciliaria ha ido ampliándose progresivamente hasta incluir actualmente a los pacientes de este programa
Finalizada la intervención, el paciente permanece en observación durante unas horas en el Hospital de Día Quirúrgico para controlar el posoperatorio inmediato y volver a evaluar si cumple con los criterios de alta en condiciones de seguridad. Si todos los parámetros son favorables, recibe el alta hospitalaria y es ingresado en su domicilio.
Ya en casa, es atendido las 24 horas por los profesionales especialistas del Servicio de Hospitalización Domiciliaria que, además de haberse formado específicamente en la atención a los pacientes neuroquirúrgicos, se mantienen en contacto durante toda la recuperación con el Servicio de Neurocirugía y de Anestesia para hacer frente a cualquier eventual complicación.
Después de 30 años prestando este servicio, que trasciende de la mera atención y trabaja con la filosofía de "montar una habitación de hospital en la casa del paciente", la cartera de servicios que prestan los profesionales de Hospitalización Domiciliaria ha ido ampliándose progresivamente hasta incluir actualmente a los pacientes de este programa.