Un brote de Covid-19 en una residencia de personas mayores en Novales ha obligado a la Consejería de Salud del Gobierno de Cantabria a activar el protocolo de actuación. Dicho brote ha dejado 13 positivos y dos usuarios de la residencia fallecidos, de 99 y 81 años, ambos con patologías previas.
Uno de los fallecidos murió en la jornada de ayer y otro hoy. De los otros 13 positivos, once tienen sintomatología leve y otros dos son asintomáticos.
En un comunicado, desde el Gobierno han informado de que la Consejería de Salud y la de Inclusión Social están trabajando de manera coordinada.
Desde Salud se va mantener un seguimiento médico de los usuarios afectados que van a ser atendidos y controlados desde los servicios de Urgencias de Atención Primaria, y Salud Pública ha activado un protocolo específico que extrema las medidas de prevención y control de usuarios y trabajadores de los centros residenciales de personas mayores.
Desde Salud se va mantener un seguimiento médico de los usuarios afectados que van a ser atendidos y controlados desde los servicios de Urgencias de Atención Primaria
Además, Inclusión Social, a través del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS), ha comunicado la situación al resto de centros residenciales de atención a la dependencia y se les han remitido recomendaciones para prevenir y controlar el virus.
Ambos departamentos consideran que estas medidas "son suficientes y adecuadas teniendo en cuenta la baja incidencia de Covid-19 en estos momentos en la comunidad autónoma", con cuatro personas ingresadas en el Hospital Valdecilla y una en Sierrallana.
En los últimos meses, la incidencia de casos de Covid-19 ha sufrido un incremento, dando lugar a nuevos brotes que han obligado, en ocasiones, a volver al uso de mascarillas en el interior de centros sanitarios. Además, la venta de tests de antígenos en farmacias españolas aumentó hasta un 174% en agosto, aunque la situación no afectó a las hospitalizaciones.