La nueva consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Esther Monzón, comenzó su andadura en el cargo tras su nombramiento a finales del pasado mes de junio. A penas dos meses que han servido para trazar algunas de las estrategias sanitarias que impulsará a lo largo de la legislatura.Se trata de un perfil bien conocedor de la realidad de la Sanidad canaria, pues ha sido directora del centro sociosanitario de Taliarte. Monzón cuenta, además, con bagaje en el área sociosanitaria, pues que estuvo al frente del centro El Pino y fue gerente del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria del Cabildo de Gran Canaria.
De esta manera, entre las primeras iniciativas que ha tenido tiempo de desarrollar, encontramos la creación de un proyecto piloto dedicado al refuerzo de la Atención Primaria. En concreto, está centrado en una serie de unidades de gestión familiar para agilizar la asistencia en los centros de salud. No en vano, la sobrecarga asistencial constituye uno de los principales desafíos a los que los diferentes servicios de salud de nuestro país pretenden dar respuesta. Una circunstancia que lleva a que las consultas de los facultativos se vean, en muchos casos, saturadAs –especialmente en verano-.
Monzón persigue dar respuesta a la gestión del exceso de demanda en la agenda de los profesionales, así como poder sustituir a un profesional por otro ante las ausencias puntuales
Con esta iniciativa Monzón persigue dar respuesta a la gestión del exceso de demanda en la agenda de los profesionales, así como poder sustituir a un profesional por otro ante las ausencias puntuales o crear grupos de incidencias de refuerzo que eviten que aumente la demora en la asistencia al paciente.Se aplicará de manera inicial en las gerencias de Atención Primaria de Tenerife y Gran Canaria, en el marco de la Estrategia Integral de Atención Primaria y Comunitaria (+AP).
PRIMER PUNTO EN LA AGENDA
La nueva consejera está trabajando, por tanto, en la línea de hacer cumplir el nuevo modelo de agendas ordinarias de 2023, que se aplicará a los médicos de la región y en el que se recoge establecer un máximo de 34 citas diarias para profesionales de Medicina de Familia y de 28 pacientes en consultas de Pediatría. Con este modelo de gestión en la AP que recoge diferentes protocolos de actuación, la consejera pretende descongestionar los centros de primera asistencia y fomentar la atención más oportuna a los pacientes, todo ello sin aumentar su media de espera para consulta -4,7 días en el mes de junio-.
La responsable de Sanidad del SCS ha incluido recientemente los sistemas de monitorización de glucosa entre sus prestaciones recogidas para los pacientes
Por otro lado, la responsable de Sanidad del SCS ha incluido recientemente los sistemas de monitorización de glucosa entre sus prestaciones recogidas para los pacientes. En concreto, serán aplicables a pacientes de diabetes tipo 2 que estén tratados con, al menos, tres dosis de insulina al día. De esta manera, se permitirá la prescripción, administración, seguimiento y control de las Bombas de Infusión Continua de Insulina y sensores de monitorización de glucosa intersticial. Un ámbito que hasta la fecha sólo se dispensaban a personas con Diabetes Mellitus tipo 1 o a personas diagnosticadas de otros trastornos del metabolismo de la glucosa.
DESAFÍOS POR DELANTE
La consejera de Sanidad tiene todavía en el horizonte una serie de importantes retos que le aguardan y que habrán de encontrar respuesta durante su mandato. El hecho de tratarse de un archipiélago acrecienta una de las mayores dificultades que se vive en todo el Sistema Nacional de Salud: la escasez de profesionales sanitarios. No en vano, Esther Monzón, centrará su foco en combatir la situación de insularidad y favorecer la atracción y fidelización de facultativos al SCS. Todo esto pasará por políticas que incentiven la llegada de profesionales por medio de favorecer unas buenas condiciones laborales.
Afronta también el importante desafío de ofrecer una atención igualitaria a todos los ciudadanos canarios, independientemente del lugar donde residan
La circunstancia de ser un archipiélago implica otra serie de condicionantes que pueden marcar la calidad asistencial de los pacientes. De esta manera, Monzón, afronta también el importante desafío de ofrecer una atención igualitaria a todos los ciudadanos canarios, independientemente del lugar donde residan; una circunstancia que planea abordar creando nuevas áreas sanitarias en la región y con la construcción de centros de salud suficientes para atender a una cada vez mayor población. Más si cabe, teniendo en cuenta la importante llegada de turistas y residentes extranjeros a lo largo de todo el año.
Esta creciente población se dirige, además, hacia un mayor envejecimiento. Algo que implicara, por un lado, un necesario relevo generacional de las plantillas de profesionales sanitarios; tratando de lograr que sea mayor el número de facultativos que van a jubilarse que los que pueden incorporarse al servicio. Por otro lado, el hecho de que la población sea de edad avanzada supone que tengan una comprensible tendencia a presentar más problemas de salud. Incidencias a las que sin duda la actual gestión de Monzón deberá aportar soluciones y que pasan nuevamente por reforzar las plantillas en el SCS.