El servicio de Urología del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria, en Tenerife, recuerda que el abuso en el consumo de alcohol, tabaco y drogas, junto a la sobreexposición a productos químicos tóxicos, dañan la capacidad fértil en el hombre.
En el marco de la celebración del Día del Padre, los urólogos recomiendan a las parejas que desean tener un hijo, acudir a los especialistas si tras un año de actividad sexual sin anticoncepción no se logra un embarazo natural, para estudiar las causas que motivan esta situación, tanto en mujeres como en hombres.
Además de las causas congénitas o lesiones adquiridas que disminuyen la fertilidad, el estilo de vida influye en la calidad espermática
En el caso de los varones, los estudios se realizan de forma personalizada e incluyen exploración física, analítica de sangre con perfil hormonal y seminograma, además de tener en cuenta los antecedentes familiares.
En este sentido, los expertos recuerdan que la edad de la mujer es un factor fundamental en la salud reproductiva y que, en los países desarrollados, la decisión de tener hijos se retrasa especialmente por condicionantes económicos y sociales. Además, el estilo de vida, los factores ambientales y las lesiones adquiridas influyen en la capacidad fértil.
El doctor Balig Amir, especialista de la Unidad de Andrología y Cirugía Reconstructiva del servicio de Urología, recuerda que, “si bien la fertilidad masculina puede estar alterada por diferentes causas, en el 30-40% de los casos no se identifica ningún factor asociado”.
En la consulta se pueden detectar y tratar aquellas causas potencialmente reversibles
No obstante, “la disminución de la calidad espermática, uno de los determinantes claves para una concepción exitosa, sí se relaciona con según diferentes estudios, con hábitos de vida poco saludables como el abuso en el consumo de tóxicos, episodios prolongados de estrés o la sobreexposición a sustancias químicas externas, provocando trastornos endocrinos”, detalla el doctor Amir.
“Los radicales libres que generan este tipo de compuestos, provocan estrés oxidativo que hace que el ADN espermático se fragmente e incida en la reducción de la espermiogénesis”, añade el experto.
Por otro lado, los urólogos recuerdan que también existen causas congénitas (como la criptorquidia) o lesiones adquiridas (traumatismos testiculares, infecciones varicocele), que disminuyen la fertilidad masculina. De ahí que recomienden acudir al especialista, pues en la consulta se pueden detectar y tratar aquellas causas potencialmente reversibles, además de aconsejar sobre cambios en el estilo de vida que favorezcan la salud reproductiva.