La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios, FSS CCOO PV, cursó la pasada semana ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social una denuncia ante la falta de seguridad de los nuevos vehículos móviles de donación de sangre que se han incorporado en la Comunidad Valenciana. El detonante surgió fruto de una incidencia durante el pasado 5 de junio con uno de los modelos implantados, el cual sufrió un escape de gasóleo en pleno servicio. Una circunstancia que se trasladó al sindicato por parte de los trabajadores sanitarios y que han llevado a la organización a solicitar explicaciones.
Desde ConSalud.es nos hemos puesto en contacto con el responsable de Salud Laboral de la FSS CCOO PV, Raúl Arambul, para que nos aclare este episodio puntual que ha servido para destapar la “excesiva celeridad” a la hora de incorporar estos nuevos recursos de movilidad sin “la oportuna formación al personal”. Hechos que han llevado al sindicato a una denuncia ante la Inspección de Trabajo, instando a que “valore si procede la inmovilización de los nuevos vehículos de donación de sangre hasta que no se realice una evaluación inicial de los equipos y formación suficiente, así como la investigación y subsanación de las deficiencias detectadas”, aclaran.
“Tuvieron que apagar todos los elementos del equipo móvil con el fin de salvaguardar la integridad y seguridad del personal y de los donantes a bordo del vehículo"
El 1 de junio de este mes se retiraron los antiguos vehículos para sustituirlos por los nuevos. Sólo unos días después uno de los trabajadores advirtió una fuga por goteo en el tubo de gasóleo sobre el grupo eléctrico que proporciona energía a los equipos, y ante la imposibilidad de refrigerar la zona adecuadamente, “tuvieron que apagar todos los elementos del equipo móvil con el fin de salvaguardar la integridad y seguridad del personal y de los donantes a bordo del vehículo, provocando además que la extracción de sangre tuviera que suspenderse”, relata Arambul.
Una circunstancia que el responsable de CCOO define como “de extrema gravedad”, al considerar que “se ha incumplido la normativa sobre prevención de riesgos laborales; pues no se ha realizado una evaluación inicial de los riesgos de los nuevos vehículos, no se ha llevado a cabo ninguna consulta al Comité de Seguridad y Salud Laboral, no se ha informado de los posibles riesgos y tampoco se ha informado ni formado suficientemente al personal sobre su uso o características específicas”. Ante estos incumplimientos la organización sindical ha optado por remitir un escrito a la dirección del Centro de Transfusión de la Comunidad Valenciana denunciando lo ocurrido y solicitando la convocatoria inmediata del Comité de Seguridad y Salud.
“Cuando se pone en funcionamiento una nueva maquinaria que sustituye a la anterior el Centro de Transfusiones está obligado por ley a formar a aquellas personas que van a utilizarlo”
El responsable sindical de Salud Laboral considera esencial que los trabajadores que van a desarrollar su trabajo con nuevos medios sean conocedores de los equipos y herramientas con las que van a desempeñar su labor. “Cuando se pone en funcionamiento una nueva maquinaria que sustituye a la anterior el Centro de Transfusiones está obligado por ley a formar a aquellas personas que van a utilizarlo”, remarca. Unas pautas que sí parece que se transmitieron a los conductores, pero no así al resto de componentes de los operativos como enfermeras y demás trabajadores.
Por parte del Centro de Transfusiones la respuesta ha sido subsanar las deficiencias en los vehículos y reparar el fallo de gasóleo que afectó al grupo electrógeno, para retomar el servicio durante este mismo martes. Una medida que Raúl Arambul comprende que nos es suficiente, pues “no se ha hecho nuevamente un estudio previo de los vehículos ni una evaluación de las condiciones de trabajo”. Por todo ello, alerta de que si este martes salen los vehículos y ocurre alguna situación no deseada para los trabajadores será “bajo la responsabilidad del Centro de Transfusiones y de la propia Consejería de Sanidad valenciana”.
“El banco no se va a quedar sin sangre por paralizar los vehículos unos días. Habría margen de tomar una pausa y explicar mejor todo lo necesario a los trabajadores para subsanar este problema”
La labor de este grueso de vehículos para la donación ciudadana constituye apenas un 10% de la sangre con la que se abastece el Centro de Transfusiones. Una cantidad nimia de recursos que no parecen justificar la precipitada puesta en marcha de la nueva flota móvil. “El banco no se va a quedar sin sangre por paralizar los vehículos unos días. Habría margen de tomar una pausa y explicar mejor todo lo necesario a los trabajadores para subsanar este problema”, sentencia el portavoz de CCOO.
Sin ir más lejos, desde el sindicato trasladan que un detalle tan esencial como la escalera de carga y descarga de materiales desde el auto al banco de sangre no cumple la normativa. “Si verdaderamente hubieran hecho una evaluación de las condiciones de trabajo se habrían dado cuenta de que esa escalera no se puede utilizar, aún así pretenden que los empleados la utilicen nuevamente este martes para subir, bajar y descargar los equipos”, concluye alarmado el responsable de Salud Laboral de la FSS CCOO PV, Raúl Arambul.