La Universidad Católica de Valencia (UCV) ha enviado un comunicado en el que asegura que trabaja con protocolos seguros en la aceptación de cadáveres para docencia e investigación. Asimismo, niega rotundamente ninguna clase de vinculación con el caso policial por el que se ha desarticulado un presunto entramado criminal relacionado con la venta de cuerpos a universidades.
"La Universidad Católica de Valencia no compra cadáveres, únicamente abona a las funerarias la cantidad establecida por estas para el transporte y la retirada de los cuerpos, la incineración posterior, así como para la tramitación de los documentos pertinentes", subraya.
"La UCV no compra cadáveres, únicamente abona a las funerarias la cantidad establecida por estas para el transporte y la retirada de los cuerpos, la incineración posterior, así como para la tramitación de los documentos pertinentes"
Además, la UCV garantiza a los donantes y a sus familias que los cadáveres son tratados "con dignidad y en el respeto al anonimato en todo momento".
"Las donaciones están en función de la mejor preparación de los futuros profesionales de la medicina y las ciencias de la salud, pues el conocimiento de la anatomía humana es una parte imprescindible de su formación, y, en definitiva, del mejor servicio a la sociedad que desempeñarán".
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en Valencia un presunto entramado criminal relacionado con la venta de cadáveres. Falsificaban documentación para poder retirar los cuerpos de hospitales y residencias para venderlos posteriormente a universidades para su estudio por 1.200 euros cada cadáver.