El Sindicato de Enfermería (Satse) sigue con sus acciones contra el Decreto para regular los servicios farmacéuticos asistenciales concertados, aprobado por la Consejería de Sanidad Universal y Salud Pública de la Generalitat Valenciana el pasado mes de octubre. Así, además de la presentación de un recurso contencioso-administrativo contra el Decreto, el sindicato continúa con su campaña de difusión del folleto 'La atención sanitaria NO es un negocio' en los centros de salud de la Comunidad Valenciana, para que, tanto trabajadores como usuarios, conozcan las "graves consecuencias" de este Decreto para la sanidad valenciana y su "objetivo privatizador encubierto".
El citado Decreto establece que las farmacias pueden realizar actividades y funciones asistenciales (sin concretar exactamente cuales) que, actualmente, realizan las enfermeras y médicos de Atención Primaria. Por estos "nuevos servicios" y "otras competencias profesionales" que prestarían las farmacias, la Consejería de Sanidad abonaría una cantidad por determinar a las farmacias. Se trataría, a juicio de Satse, de "privatizar funciones que ahora se realizan en los centros de salud, dejándolas en manos de las farmacias".
A juicio de Satse, se trataría de "privatizar funciones que ahora se realizan en los centros de salud, dejándolas en manos de las farmacias"
Este Decreto supone el punto de partida para que las oficinas de farmacia amplíen sus competencias, pasando a realizar actividades sanitarias como seguimiento de pacientes con problemas de salud crónicos, cribado de pacientes con diferentes patologías, revisión de botiquines, etc., haciendo también visitas domiciliarias.
Representantes del Sindicato de Enfermería se han reunido con la jefa del Servicio de Gestión Asistencial, Carmen Puchalt Sanchis, y el jefe del Servicio de Ordenación, Control y Vigilancia del Producto Farmacéutico, Julio Muelas Tirado, para plantearles sus dudas respecto de este nuevo servicio farmacéutico y exponerles su punto de vista al respecto.
CAMPAÑA DE SATSE
El Sindicato de Enfermería inició hace algunas semanas esta campaña informativa para que profesionales y usuarios conozcan que, a su juicio, la Farmacia comunitaria supone "un paso hacia la privatización de la sanidad pública" y que traerá "un gasto adicional, que saldrá de las arcas públicas de la Generalitat, a cambio de que los farmacéuticos realicen labores que, actualmente, ya prestan de manera gratuita los profesionales de Enfermería y médicos de Atención Primaria".