La Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha atendido a 391 pacientes crónicos vulnerables que requerían algún tipo de atención médica o farmacéutica inminente gracias al seguimiento telefónico del centro de coordinación de atención a crónicos instalado en La Fe para prestar asistencia a las poblaciones afectadas por la DANA.
Hasta hoy, han contactado con 5.026 pacientes a través de un asistente cognitivo mediante inteligencia artificial. Entre ellos, se han detectado 2.281 alertas que facilitaron la priorización de las llamadas, siendo contactados después por un profesional sanitario en función de las prioridades establecidas. Según indican desde la Generalitat, estos profesionales resolvieron la necesidad o la canalizaron a los equipos de atención primaria u hospitalaria dependiendo de la complejidad.
Hasta hoy, han contactado con 5.026 pacientes a través de un asistente cognitivo mediante inteligencia artificial
El proceso asistencial puesto en marcha consiste en un primer envío de SMS avisando al paciente de la llamada. Posteriormente, el asistente virtual realiza la llamada al paciente y mantiene una conversación en la que recaba información del estado de salud y disponibilidad de medicamentos para priorizar el trabajo de los profesionales que en menos de una hora contactan con los pacientes.
En este sentido, mantienen una entrevista clínica apoyándose en los datos recogidos por el asistente y la información disponible en el software, como asignación territorial, diagnósticos, medicación activa y último contacto con los servicios sanitarios. Durante la llamada, o bien se resuelve la necesidad o se canaliza a los equipos de atención primaria u hospitalaria dependiendo de la complejidad.
COORDINACIÓN DE VOLUNTARIOS
La Generalitat Valenciana apunta que la coordinación de voluntarios ha sido una de las actuaciones que la Conselleria de Sanidad ha llevado a cabo desde que se produjo la DANA. Ante volumen de población afectada y la gran cantidad de profesionales sanitarios que, de forma voluntaria, mostraban su interés en prestar de forma altruista sus servicios para hacer frente a la catástrofe, la Conselleria de Sanidad tomó la decisión de coordinar esta solidaridad.
De este modo, han buscado maximizar el apoyo recibido complementando la actuación que los servicios sanitarios públicos estaban realizando sobre el terreno y minimizando los riesgos de una atención sanitaria descontrolada que pusiera en riesgo a los ciudadanos, a los propios profesionales solidarios y evitase intrusismos o utilización indebida de medicamentos o materiales sanitarios sin garantías.
En esta tarea de coordinación de voluntariado, la Conselleria ha contado con la colaboración de la ONG Médicos Sin Fronteras para la gestión de los profesionales sanitarios voluntarios del Centro de Atención a Crónicos instalado en la Fe
En este sentido, apuntan que se creó un formulario para el registro de los voluntarios que se estaban ofreciendo por miles para ayudar en todas las zonas afectadas y a los que la Conselleria de Sanidad agradece su colaboración desinteresada. A todo estos, Sanidad les ha informado de que esta medida es altruista y complementaria a la atención que ya están asumiendo los profesionales de los departamentos de salud.
En esta tarea de coordinación de voluntariado, la Conselleria ha contado con la colaboración de la ONG Médicos Sin Fronteras para la gestión de los profesionales sanitarios voluntarios del Centro de Atención a Crónicos instalado en la Fe. Las principales tareas que se realizan desde este centro son asegurar la recepción de solicitud de necesidades en los puntos asistenciales, identificar la disponibilidad, competencias y preferencias del voluntariado y combinar ambas informaciones para asignar voluntarios a los puntos donde los necesiten.
Entre las alertas detectadas por el sistema, las más habituales han sido las llamadas realizadas por empeoramiento de la salud, la necesidad de medicación, o una situación de emergencia. Ante estas necesidades, caben añadir otras detectadas por los sanitarios que realizan las llamadas, como la necesidad de atención sanitaria, atención social o la demanda de alimentos básicos, entre otras.