La Comisión de Sanidad y Consumo de las Cortes Valencianas aprobó, el pasado 26 de abril, una proposición no de ley (PNL) en la que se solicita al Gobierno que preside Ximo Puig la sustitución de los inhaladores presurizados con hidrofluorocarburos (HFC) por aquellos dispositivos con menor huella de carbono.
La iniciativa, presentada y defendida por el doctor Manuel Pineda, diputado del Grupo Parlamentario Socialista, ha contado con el apoyo de PSPV-PSOE, Compromís, Podem y Ciudadanos. En una entrevista telefónica concedida a ConSalud.es, el médico de Familia explica que el objetivo fundamental es "formar, concienciar e incentivar" la lucha contra el cambio climático.
"La huella de carbono que generan los inhaladores DPI es 18 veces inferior a la que originan gases como los hidrofluorocarburos"
Pineda señala que organizaciones científicas a nivel autonómico, nacional e internacional como la Sociedad Madrileña de Neumología y Cirugía Torácica (Neumomadrid), la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) o la British Thoracic Society (BTS) han publicado documentos en los que recomiendan, en igualdad de condiciones, reemplazar los inhaladores presurizados con HFC por la "alternativa" que ofrecen los inhaladores de polvo seco (DPI).
No en vano, continúa, “la huella de carbono que generan los DPI es 18 veces inferior a la que originan gases como los hidrofluorocarburos". La radiografía de la Comunidad Valenciana refleja, sin embargo, que los pacientes levantinos utilizan tres millones y medio de inhaladores, de los cuáles dos millones de dispositivos están compuestos por HFC. "Estos datos son equivalentes a la huella de carbono que suponen 1.640 vuelos Madrid-Londres o la conducción de 27.300 vehículos", advierte el diputado por Alicante en conversación con este diario.
Manuel Pineda expone que la PNL, que cuenta con el "visto bueno" de la Consejería de Sanidad Universal y Salud Pública, persigue que el Ejecutivo valenciano "dé paso a la acción" con la creación de un plan de concienciación, dirigido tanto a los profesionales sanitarios como a la población general. Países como Reino Unido, agrega, brindan a los pacientes asmáticos la posibilidad de escoger si el inhalador que desean utilizar cause un menor efecto en la huella de carbono.
"Los datos de uso de inhaladores presurizados con HFC en la Comunidad Valenciana son equivalentes a la huella de carbono que suponen 1.640 vuelos Madrid-Londres o la conducción de 27.300 vehículos"
Gracias al beneplácito de las Cortes Valencianas, la iniciativa ha instado al Gobierno regional a la inclusión, en la 'Estrategia valenciana de cambio climático y energía 2030', de objetivos encaminados a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero ligadas al sector de la salud.
Una de las claves, concluye el representante de la formación socialista, es la necesidad de reforzar la "educación sanitaria". "Un buen manejo de la enfermedad puede beneficiar al medioambiente", sentencia Pineda.