La consejera Sanidad Universal y Salud Pública, Ana Barceló, ha visitado las nuevas instalaciones de la Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria (UTCA) del Hospital Universitario de Sant Joan d’Alacant. Una unidad que “nace con el objetivo de mejorar la calidad asistencial y la accesibilidad de los y las pacientes con trastornos de la conducta alimentaria y sus familiares”, como ha subrayado Barceló.
La nueva UTCA, integrada en el Servicio de Psiquiatría y de referencia para la provincia de Alicante desde hace más de 20 años, “va a ofrecer una asistencia integral y especializada de manera continuada durante todo el año a pacientes con trastornos de la conducta alimentaria”, ha remarcado la titular de Sanidad.
Barceló ha recordado que "es el primer proyecto que dota a la UTCA de unas instalaciones en una planta propia y garantiza el funcionamiento ininterrumpido de la hospitalización y la asistencia ambulatoria".
La Unidad ha supuesto una inversión de 123.340 euros, resultantes del coste de la obra (113.340 euros) y el nuevo mobiliario adquirido (10.000 euros)
La consejera ha estado acompañada en su visita por la directora territorial de Sanidad en Alicante, Encarna Llinares; la gerente del Departamento de Salud Alicante-Sant Joan d’Alacant, Beatriz Massa, y su equipo directivo, así como el jefe del Servicio de Psiquiatría, Vicente Elvira; el supervisor de Enfermería de Psiquiatría, Marcelino Pastor, y la psicóloga de la UTCA, Cristina Romero.
La nueva UTCA se ubica en la primera planta, zona norte, con lo que se mejora su accesibilidad, frente a su anterior localización, en la planta tercera sur. Además, antes compartía planta con pacientes de otras especialidades, tanto médicas como quirúrgicas, mientras que ahora dispone de un espacio propio en una planta exclusiva para atender estos trastornos.
Otra de las mejoras acometidas ha sido la separación de los dos niveles asistenciales, el de hospitalización y el ambulatorio. “La nueva área de consultas externas está ahora situada fuera de la planta de ingreso, también en la primera planta, lo que supone un indicador de calidad”, ha apuntado Barceló.
Además, la unidad de hospitalización incluye mejoras estructurales, con una mayor dotación tecnológica, unas instalaciones más cómodas, un aumento de alrededor del 10% de los espacios y una mejor reorganización de los mismos.
En el abordaje terapéutico de estos pacientes se considera prioritaria la privacidad, intimidad y atención individualizada, aspectos que serán especialmente cuidados en esta Unidad, mediante un moderno sistema de videovigilancia, que mejora en términos de seguridad.
TRES HABITACIONES DOBLES
En cuanto a la distribución de la Unidad, ésta cuenta con tres habitaciones dobles de 20m² cada una de ellas, con sus respectivos baños; una amplia sala de esparcimiento, dotada de medios audiovisuales, cercana a los 30m²; dos consultas y un control de Enfermería, en una superficie útil de 180m², aproximadamente.
La UTCA se compone de un equipo sanitario de 14 profesionales con formación especializada en el abordaje de las patologías alimentarias: un psiquiatra, una psicóloga, seis profesionales de Enfermería y seis técnicos de cuidados auxiliares de Enfermería.
Atendiendo a la actividad realizada, la unidad ha registrado en los últimos tres años alrededor de 150 ingresos, con una media de 45-50 anuales. Se han contabilizado más de 300 consultas de Psicología al año y más de 600 de Psiquiatría. De ellas, el 85% corresponden a consultas de seguimiento de pacientes y el 15% restante son primeras visitas.
El 95% de los pacientes son mujeres y un 40% menores de edad
Por lo que respecta al perfil de paciente, el 95% son mujeres y un 40% menores de edad. “El perfil típico es el de una anorexia nerviosa restrictiva o bulímica, asociada a un Índice de Masa Corporal (IMC) muy bajo”, ha explicado el jefe de Servicio de Psiquiatría, Vicente Elvira.
“En los últimos cuatro años hemos asistido a un incremento del rango de edades, tanto por abajo como por arriba (por ejemplo, con pacientes de menos de 14 años o más de 45)”, ha apuntado el jefe de Psiquiatría.
También, “observamos en algunos casos una disminución del IMC en el momento del ingreso, lo que puede deberse a una mayor tolerancia en nuestra sociedad a la delgadez. Es habitual igualmente contemplar en estos pacientes comorbilidad con los trastornos de la personalidad”, ha precisado la psicóloga de la unidad, Cristina Romero. Por otro lado, cabe recordar que la UTCA forma parte de un Servicio de Psiquiatría que cuenta también con la Unidad de Hospitalización Psiquiátrica más grande de la provincia, con 30 camas.
MEJORAS EN LA ATENCIÓN AL PACIENTE
La máxima responsable de Sanidad ha visitado también el Servicio de Atención e Información al Paciente (SAIP), en el que se acaba de acometer una obra de adecuación, redistribución y ampliación de espacios, por una inversión cercana a los 50.000 euros.
“Esta actuación ha velado por ofrecer una mayor comodidad y humanizar los espacios en los que se informa y asesora a los usuarios”, ha precisado la consejera, quien ha puesto en valor “un servicio fundamental en el sistema público para garantizar los derechos y las necesidades del paciente”.
El SAIP, que se mantiene en el vestíbulo del hospital, cuenta ahora con una única entrada, con un aspecto abierto y actual mediante una gran cristalera, y en el interior se compone de un espacio principal y diáfano que facilita el acceso a los puestos de atención, separados con mamparas y vidrieras.
Se ha creado un nuevo punto SAIP de información
“Esta distribución del servicio permite una mayor visibilidad y una gestión más eficaz en la canalización de la atención al usuario”, han apuntado las enfermeras jefe del SAIP, Mª José Barceló y Carmen López. Los puestos de atención al paciente se han ampliado de tres a cinco, con la integración del espacio que ocupaban dos despachos de Trabajo Social, que se han trasladado a su vez a una nueva ubicación.
Asimismo, se ha creado un nuevo punto SAIP de información, ubicado en el sótano, en el acceso de las ambulancias a consultas externas, con el que se pretende aumentar la información que reciben el paciente y sus familiares. Este servicio ha realizado 11.376 gestiones durante el año 2018, frente a las 9.282 de 2017. Esto significa un incremento anual de la actividad del 22,5%. Un ejemplo de ello es el registro de voluntades anticipadas, que se ha visto duplicado, pasando de recoger 130 en el año 2017 a 284 el año pasado.