La jornada semanal de 35 horas en la sanidad valenciana parece alejarse en el horizonte cada vez más. La idea inicialmente planteada desde la Generalitat, y a la que se comprometió el pasado noviembre con los sindicatos del ramo, pasaba por la implantación el 1 de enero de 2025 de una jornada de 35 horas “real” de lunes a viernes. Sin embargo, en los últimos meses el asunto parece haberse pausado y desde marzo no se ha mantenido ninguna mesa técnica para avanzar en esta medida.
Más allá de eso, los últimos movimientos del Gobierno autonómico apuntan a que su intención es extender el nuevo horario laboral a todo el sector público de la Administración autonómica con vistas al 2026. No en vano, el propio consejero de Sanidad, Marciano Gómez, hadeslizado en reiteradas ocasiones que la negociación de las 35 horas en Sanidad se hará "con el calendario pactadopor el conjunto de la Administración en el acuerdo de legislatura", o lo que es lo mismo, el 2026.
"En su momento, cuando nosotros estábamos en huelga, el consejero asumió un compromiso con todos nosotros: instaurar la jornada de 35 horas el 1 de enero de 2025”
Este paso atrás en lo comprometido con los profesionales sanitarios ha supuesto un jarro de agua fría para el colectivo médico, que se sienten “enfadados y defraudados” por la Administración. “En su momento, cuando nosotros estábamos en huelga, el consejero asumió un compromiso con todos nosotros: instaurar la jornada de 35 horas el 1 de enero de 2025”, explica a ConSalud.es el Dr. Alejandro Calvente, presidente de CESM-CV, quien puntualiza que, incluso, se llegó a negociar “una implantación previa a esa fecha”.
Entre los factores que se apuntan como un escollo a la llegada de esta nueva jornada sanitaria -en el plazo prometido- aparecen principalmente dos: la necesidad de ampliar las plantillas y los costes económicos que estas contrataciones supondrían para las arcas públicas. “Les trasladamos las claves para poder hacerlo de manera sencilla. Es falso que hagan falta más médicos para implantar la jornada”, deja patente el responsable sindical de los médicos valencianos.
“Cada cual que asuma las consecuencias de lo que hace. Nosotros exigimos que cumpla con la fecha estipulada del 1 de enero de 2025”
En esta línea, el colectivo médico valenciano reitera que la luz verde a este nuevo horario "no requeriría, a nivel organizativo, contar con ningún médico más” ni implicaría “ningún gasto añadido” para la Consejería de Sanidad. En concreto, el Dr. Calvente explica que el facultativo que tenga que hacer las guardias de los sábados solo tendría que ampliar este periodo “de 17 a 24 horas”, por lo que simplemente empezaría la guardia a las “8:00 en lugar de a las 15:00”.
De hecho, el presidente de CESM-CV considera que la reestructuración de la jornada sanitaria incluso beneficiaría a la propia Administración, dado que el departamento de Sanidad “paga muy barata la guardia del sábado y podría cubrir esas horas -por la mañana- a precio de guardia, en lugar de a precio de jornada ordinaria”. No en vano, aclara el facultativo valenciano, “por rocambolesco que parezca, las horas de guardia se pagan por debajo del precio de la hora ordinaria”.
“No podemos obviar la grave situación que padece nuestra sanidad pública por la falta de profesionales; provocada, entre otras causas, por la precariedad y las mejores condiciones de trabajo en otras CC.AA.”
Los médicos consideran que “no es razonable”, alcanzándose ya el final de año, escudarse en "ninguna excusa" para no cumplir con lo acordado con la Consejería: la llegada de las 35 horas a la Comunidad Valenciana. Más si cabe, teniendo en cuenta que se trata de la única comunidad autónoma, junto con Cataluña y Madrid, donde todavía no se ha iniciado la implantación de esta jornada. “Cada cual que asuma las consecuencias de lo que hace. Nosotros exigimos que cumpla con la fecha estipulada del 1 de enero de 2025”, reitera Calvente.
De hecho, el colectivo médico destaca que la llegada de la nueva jornada laboral a orillas del mediterráneo supondría la posibilidad de atraer a nuevos facultativos. “No podemos obviar la grave situación que padece nuestra sanidad pública por la falta de profesionales; provocada, entre otras causas, por la precariedad y las mejores condiciones de trabajo en otras CC.AA.”, remarca el responsable sindical, ahondando en que “los médicos no se van de la Comunidad Valenciana, sino que los echan”.
“La paciencia tiene un límite y los médicos sienten que les han tomado el pelo. Estamos articulando movilizaciones"
En este contexto, el sindicato médico valenciano tiene claro que lo que sí que no se va a demorar es su respuesta decidida ante el cambio de plazos para hacer vigente esta necesaria mejora laboral. “La paciencia tiene un límite y los médicos sienten que les han tomado el pelo. Estamos articulando movilizaciones para responder a este conflicto; queda solo en manos de la Consejería de Sanidad el hecho de evitarlo”, concluye el presidente de CESM-CV.